Primer crucero en navegar desde EE. UU. Mientras la industria busca su regreso

MIAMI 

“Estamos emocionados de ser parte de eso”, dijo Russ Schwartz, un director de una escuela de Florida que está de luna de miel en el barco y confía en que todo será viento en popa. “Las cosas han cambiado drásticamente. En ese entonces, realmente no sabíamos mucho sobre el virus. Los cruceros en ese momento no estaban preparados ".

Celebrity Cruises, una de las marcas de Royal Caribbean Cruises, dice que al menos el 95% de los que abordan el Celebrity Edge han sido vacunados contra el coronavirus de acuerdo con los requisitos de salud de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, y el barco funcionará a un precio reducido. capacidad.

Será un viaje de lujo a bordo de un barco que se inauguró en diciembre de 2018 con un spa gigante y suites de varios pisos. El barco de mil millones de dólares estará dirigido por la capitana Kate McCue, quien en 2015 se convirtió en la primera mujer estadounidense en capitanear un crucero y ha atraído a más de 1 millón de seguidores en TikTok y 250.000 en Instagram.

Hay mucho en juego para las líneas de cruceros, ya que surgen de un cierre impuesto por los CDC que duró 15 meses. Durante ese período, los tres gigantes de la industria, Carnival, Norwegian y Royal Caribbean, han tenido que recaudar más de $ 40 mil millones en financiamiento solo para mantenerse a flote sin ningún ingreso.

En conjunto, perdieron $ 20 mil millones el año pasado y otros $ 4,5 mil millones en el primer trimestre de 2021, según los documentos de la Comisión de Bolsa y Valores.

"Las líneas de cruceros se están poniendo de rodillas después de quedar paralizadas por COVID-19", dijo Michael Winkleman, un abogado marítimo. "Hay demasiado dinero en juego para que las líneas de cruceros no lo hagan bien".

Para cumplir con el requisito de vacunación del 95% de los CDC y una nueva ley de Florida que prohíbe a las empresas exigir a los clientes que muestren prueba de vacunación, Celebrity Cruises simplemente pregunta a los huéspedes si les gustaría compartir su estado, dijo la portavoz Susan Lomax.

Aquellos que no muestren voluntariamente un comprobante de vacunación serán tratados como no vacunados y estarán sujetos a protocolos adicionales, como usar máscaras faciales y estar restringidos a áreas designadas para sentarse en áreas comunes como comedores, casinos y teatros.

El año pasado, los CDC criticaron a la industria de los cruceros por mantener abiertos los bares, gimnasios y buffets de autoservicio y continuar permitiendo que los miembros de la tripulación se reúnan incluso mientras la pandemia se desataba.

A partir de marzo de 2020, los datos mostraron 3.689 casos confirmados o sospechosos de COVID-19 en cruceros en aguas de EE. UU. Y al menos 41 muertes. El CDC dice que pasó 38,000 horas-persona manejando solo la respuesta de crucero a COVID-19, incluido el rastreo de contactos para 11,000 pasajeros.

La evacuación médica y los esfuerzos logísticos para los pasajeros que desembarcan de barcos como el Zaandam en Fort Lauderdale y el Grand Princess en Oakland, California, también desviaron recursos de las agencias locales que intentaban frenar la propagación del COVID-19.

Desde entonces, decenas de pasajeros han presentado demandas diciendo que las compañías no los protegieron ni les advirtieron sobre el virus, especialmente después de un brote en el Diamond Princess de Carnival frente a las costas de Japón con más de 700 casos confirmados y nueve muertes.

El cierre prolongado también ha sido impugnado en los tribunales. En abril, Florida demandó al gobierno federal para exigir que se permitiera a los cruceros comenzar a navegar, argumentando que la prohibición daña desproporcionadamente al estado donde la industria genera miles de millones cada año para la economía.

La semana pasada, un juez otorgó una orden judicial preliminar que evita que los CDC hagan cumplir las condiciones de navegación, que el estado dice que efectivamente bloquea la mayoría de los cruceros.

Celebrity Edge zarpará antes de que la orden judicial entre en vigor, por lo que está cumpliendo con las condiciones.

La Asociación Internacional de Líneas de Cruceros, que representa alrededor del 90% de la capacidad mundial de cruceros, dijo que aprecia los esfuerzos del gobernador de Florida, Ron DeSantis, para respaldar a la industria y que las líneas de cruceros están dando prioridad a la salud y la seguridad. Alrededor de 600.000 pasajeros han navegado en barcos miembros fuera de los EE. UU. Desde el verano pasado y la incidencia del coronavirus ha sido baja.

"Los protocolos de la industria están funcionando según lo previsto", dijo la asociación en un comunicado. "El exitoso lanzamiento de las vacunas en los Estados Unidos cambia las reglas del juego y facilita los viajes seguros".

Aproximadamente el 44% de las personas en todo el país están completamente vacunadas, según los CDC, y los nuevos casos de COVID-19 en los EE. UU. Han disminuido drásticamente desde su pico a principios de este año.

Katherine Quirk-Schwartz, una pasajera de Celebrity Edge y enfermera registrada que está emocionada por el próximo crucero y espera conocer al Capitán McCue, recordó cómo su hospital recibió a algunos de los primeros pacientes con COVID-19 de cruceros cuando finalmente se les permitió entrar en tierra. Florida después de días de negociación.

“Es casi como un círculo completo. Es increíble reflexionar sobre eso ”, dijo. “A medida que cambian más cosas, se abren más cosas, veremos más efectos de la vacuna. La gente está volviendo a vivir, la gente está volviendo a navegar ”. ___

El escritor de Associated Press David Koenig contribuyó desde Dallas.