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Momento crucial

La llegada a México del enviado especial del presidente de los Estados Unidos Donald Trump, Jared Kushner, su yerno y uno de sus principales consejeros, hace evidentes tres cosas: La importancia de este país como vecino de la potencia del norte; el vacío que deja la renuncia de la renuncia de la embajadora Roberta Jacobson y la posibilidad de anunciar su relevo en la persona de Larry Rubin; además de apuntalar al régimen.

Kushner, un joven de 36 años que pertenece a uno de los círculos más poderosos de los Estados Unidos, a quien Donald Trump nombró como consejero de la presidencia, viene acompañado de altos funcionarios del Departamento de Estado y del Consejo de Seguridad Nacional de la Unión Americana, a fin de tratar ‘importantes temas de la agenda bilateral’, que, necesariamente están relacionados con los desacuerdos que se han suscitado en los días recientes, cuando acaba la séptima ronda de negociaciones del TLC y se anuncia la aplicación de aranceles al acero y aluminio que ingresen a EU.

Momento crucial

Además del presidente Enrique Peña Nieto, serán recibidos en Palacio Nacional por el canciller Luis Videgaray, considerado su amigo, quien dijera que: “Nos conocemos a través del mundo de las finanzas. Como secretario de Hacienda tuve oportunidad de estar en contacto con muchas personas, era parte de mi trabajo y lo que estábamos buscando era establecer una comunicación clara para darle a Trump una visión de lo que realmente es México”. Al parecer, este último tema será el trabajo de los visitantes dado que el mandatario estadounidense no ha tenido el tacto necesario para entenderlo.

Quizá fue una mala idea mezclar los asuntos del tráfico de estupefacientes con los que tienen que ver con el TLC y la aplicación de aranceles, cuando dijo, en el mismo ‘twitt’ que: “México debe hacer mucho más en frenar la entrada masiva de drogas a EE UU. No han hecho lo que debe hacerse. Millones de personas adictas y muriendo”, asunto que debe tener un tratamiento aparte por ser de muy alta sensibilidad. Eso pudo causar molestias innecesarias que tendrán que limarse con un contacto más amigable.

No es la primera vez que Jared cumple una ‘misión imposible’ para su suegro. Cuando fue nombrado jefe de campaña, creo una estrategia digital tipo ‘millennials’ que le llevó muchos votos.  Luego diría que: “Llamé a varios de mis amigos de Silicon Valley, algunos de los mejores vendedores digitales en el mundo, y les pregunté cómo harían para escalar esto. Me contactaron con sus subcontratistas. También llamé a alguien que trabaja para una de las empresas de tecnología con las que trabajo, y me dieron un tutorial sobre cómo utilizar el microtargeting de Facebook”. Así, el equipo de campaña de Trump pasó de vender 8 mil dólares diarios en gorras rojas y otros artículos a 80 mil dólares. Jared entendió el mundo en internet de una forma en que la gente de los medios de comunicación tradicionales no lo hacían. Se las arregló para montar una campaña presidencial con poco dinero usando nuevas tecnologías y ganó. 

Por ello, ahora, cumpliendo aquella predicción de que “Jared Kushner tendrá como responsabilidad dar sugerencias sobre las relaciones exteriores y en particular sobre México”, se encuentra en el país para restaurar las relaciones que parecen tensarse en momentos en que Estados Unidos necesita de sus mejores aliados a fin de enfrentar lo que puede ser una guerra comercial de resultados imprevisibles para todo el planeta.

Por otra parte, aunque la salida de la embajadora Jacobson se planea para semanas más tarde, es posible que sea presentado el posible nuevo representante de Estados Unidos en México, Larry Rubín, quien actualmente es delegado del Partido Republicano.

De esta visita a México, puede resultar que Jared Kushner responda al espaldarazo que recibió Trump, con la invitación que recibió de Peña y Videgaray para visitar México en plena campaña por la presidencia.