Mártires y bárbaros

Aún recuerdo el trágico evento que sucedió hace unos años en una provincia del norte de Francia, donde en plena misa, frente al altar, un sacerdote llamado Jacques Hamel fue asesinado por dos terroristas que cobardemente sometieron al anciano de 86 años y grabaron en video cuando lo degollaban. De acuerdo con versiones de los testigos del terrorífico ataque que estaban allí para la misa diaria, me hicieron pensar que en Europa el diablo andaba suelto. Sin embargo, en diferentes partes del mundo, y sin excluir a los Estados Unidos donde los ataques de humanos contra sus semejantes son claro ejemplo de que el diablo sigue suelto y más agresivo que nunca. 

En aquella ocasión los atacantes fueron abatidos por las fuerzas del orden y el presidente de aquel país europeo tuvo una vez más que salir a denunciar este ataque perpetrado por terroristas yihadistas en su país.

Así podría segur enumerando desastres similares, pero lo ideal sería concentrarnos en formas de como el lugar de promover el odio, buscar maneras de respetar y amar a los demás.

El Papa ha expresado su dolor y horror por estos ataques pero insiste que no debemos caer en ese juego de esos seres desquiciados que desean levantar una guerra contra su propia raza, entre religiones, en vecindarios o entre países.

En el Medio Oriente y en África el grupo terrorista Boko Haram, cometen cotidianamente actos repudiables y abominables contra católicos y ortodoxos, como en contra de la población musulmana que no comparte su fanatismo, todos tenemos presente el rapto de 300 jovencitas que fueron secuestradas en una escuela y de las cuales solo algunas han sido encontradas.

Y como olvidar las imágenes de 20 cristianos cópticos de Egipto siendo decapitados por unos barbaros radicales que tratan de imponer un estado islámico (ISIS por sus siglas en ingles) y aunque estas atrocidades las llevan a cabo en nombre de Ala, los mismos líderes musulmanes los han denunciado y repudiado, pues desacreditan al Islam como religión, al tratar de imponerlo como un estado político y barbárico.

Como ciudadanos del mundo, este es el momento de la serenidad y da la unidad, y también es el tiempo de defender más que nunca la libertad y el respeto por los derechos individuales, lo contrario sería renunciar a los principios básicos que sustentan nuestra convivencia.

Vive un día a la vez! ... ignite the moment!...Y recuerda que Dios te ama y yo también. 

Msgr. Juan Nicolau, Ph. D. STL. Sacerdote jubilado de la Diócesis de Brownsville. Es psicoterapeuta familiar y consejero profesional con licencias.Msgr. Juan Nicolau, Ph. D. STL. Sacerdote jubilado de la Diócesis de Brownsville. Es psicoterapeuta familiar y consejero profesional con licencias.