Columnas > ERNESTO SALAYANDIA GARCÍA

¿El borracho es un drogadicto?

La ansiedad es la gasolina de las adicciones y de las conductas tóxicas

Sin distinción, todos por igual.

La enfermedad emocional tiene características comunes, como la neurosis, la soberbia, la ansiedad, las conductas tóxicas, defectos de carácter, inmadurez, es lo mismo para las víctimas de los trastornos alimenticios como para el maniaco depresivo o el adicto a la pornografía, igual, el alcohólico o el marihuano, no distingue, edad, ni sexo, ni posición social, tampoco, religión o cuestiones políticas, agarra a todo el mundo por parejo y hay otro factor en común, que es la negación, en enfermo no acepta su enfermedad como tal, no quiere ver la cruda realidad y se excluyen del pantano de arenas movedizas, por soberbia, no acepta ayuda, cuando va a grupo, a calentar la banca, siente que todo lo sabe,  como el, bachiller de medicina, que confunde el vino con la orina, muchos militantes de los grupos de autoayuda, no corrigen sus conductas tóxicas, son adictos a las mentiras, adictos también a meterse en lo que no les importa, adictos al Tafil, al sexo, al sufrimiento y a las depresiones, son víctimas de una vida ingobernable e irreverente, no son diferentes, un alcohólico a un drogadicto, un codependiente a un adicto a la comida, todos somos compañeros del mismo dolor, hermanos de una perra, maldita enfermedad perversa del alma, llamada,  La Saliva del Diablo.-

¿El borracho es un drogadicto?

La ansiedad es la gasolina de las adicciones y de las conductas tóxicas

El codependiente, así como el adicto todo tipo de sustancias, como el comedor compulsivo o el maniaco depresivo, son víctimas de la compulsión y ya sea un pase de cocaína, un atascón, una arponeada de heroína, un puño de fármacos, o el apostar en la ruleta, como también, ver pornografía o tener conductas tóxicas, en todos los casos, obedecen a la compulsión generada por la ansiedad, he aquí, algunos síntomas de los enfermos emocionales.-

Los signos y síntomas de la ansiedad más comunes

Sensación de nerviosismo, agitación o tensión.- Sensación de peligro inminente, pánico o catástrofe.- Aumento del ritmo cardíaco.-Respiración acelerada (hiperventilación) Sudoración.- Temblores.- Sensación de debilidad o cansancio.- Problemas para concentrarse o para pensar en otra cosa que no sea la preocupación actual.- Tener problemas para conciliar el sueño-- Padecer problemas gastrointestinales (GI) - Tener dificultades para controlar las preocupaciones.- Tener la necesidad de evitar las situaciones que generan ansiedad.- Existen varios tipos de trastornos de ansiedad, el enfermo, recurre a la sustancia o a las conductas tóxicas, lo que significa, como si fuera arrullo al alma.- La ansiedad es básicamente un mecanismo defensivo. Es un sistema de alerta ante situaciones consideradas amenazantes. Es un mecanismo universal, se da en todas las personas, es normal, adaptativo, mejora el rendimiento y la capacidad de anticipación y respuesta. La función de la ansiedad es movilizar al organismo, mantenerlo alerta y dispuesto para intervenir frente a los riesgos y amenazas, de forma que no se produzcan o se minimicen sus consecuencias. La ansiedad, pues, nos empuja a tomar las medidas convenientes (huir, atacar, neutralizar, afrontar, adaptarse, etc.), según el caso y la naturaleza del riesgo o del peligro. El peligro viene dado por la obstaculización de cualquier proyecto o deseo importante para nosotros, o bien por la degradación de estatus o logros ya conseguidos. El ser humano desea lo que no tiene, y quiere conservar lo que tiene. La ansiedad pues, como mecanismo adaptativo, es buena, funcional, normal y no representa ningún problema de salud, sin embargo, en algunos casos, este mecanismo funciona de forma alterada, es decir, produce problemas de salud mental y, en lugar de ayudarnos, nos incapacita.