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Ahora todos quieren y Egidio mete las manos

Como les comenté anteriormente, la gallera priísta anda alborotada. Los resultados obtenidos en el Estado de México y Coahuila los trae emocionados y por lo mismo, de repente, se volvió apetitoso ser dirigente estatal del PRI. 

Presienten que en 2018 tienen posibilidades de regresar por la puerta grande y en el caso de Tamaulipas recuperar los palacios municipales de los que los desalojaron en junio del año pasado y no se diga volver a tener acceso a Los Pinos, lo que abre un promisorio horizonte político a quienes hayan contribuido a la victoria, lo mismo por la presidencia de la República que por las senadurías, diputaciones federales y en el caso de nuestro Estado, incluyendo las alcaldías.

Ahora todos quieren y Egidio mete las manos

Pero ese súbito interés por ocupar la presidencia del PRI estatal también está provocando molestias como en ENRIQUE CÁRDENAS DEL AVELLANO, quien anunció que impugnará la convocatoria para la renovación del Comité Directivo Estatal del PRI tamaulipeco.

No le agrada que esa decisión vaya a estar en manos de los delegados, puesto que la mayoría de ellos son de filiación ‘‘egidista’’ y aunque usted no lo crea allá en Ciudad Victoria cuentan que EGIDIO TORRE CANTÚ anda metiendo la cuchara con todo y lo insultante que resulta para los priístas esa intención, pues están plenamente convencidos que el exgobernador los entregó en las elecciones de junio pasado.

Y a lo mejor sí o a lo mejor no, finalmente todas son sospechas pero por ser generalizadas lo inteligente sería que Egidio se abstenga de andar metiendo las manos en ese proceso. Con que no se acuerden de él debe darse por bien servido y además, de donde acá le salió lo político si todos sabemos que fue gobernador por una desgracia, pues ni siquiera apareció su foto en la boleta electoral.

Gracias a las maniobras de EUGENIO HERNÁNDEZ FLORES fue como se le hizo despachar el palacio de gobierno del Estado, que en lo administrativo se puede considerar de regular su gestión pues cargó con una colosal deuda y cumplió con el encargo de irla toreando pero en lo político fue un desastre, era natural que sucediera, nunca ocultó su desdén hacia los llamados operadores políticos de los que en una reunión del tricolor dijo que con dinero cualquiera era operador.

No quería sacar de alguno de los morrales los billetes que se requieren para las campañas políticas. No los surtió de gasolina en las elecciones de 2012 y al PRI prácticamente lo barrieron por Tamaulipas con seis de las ocho diputaciones, las dos senadurías y el colmo es que hasta JOSEFINA VÁZQUEZ MOTA le pasó por encima a ENRIQUE PEÑA NIETO.

Cuentan que luego le jalaron los pelos y lo obligaron a que también trabajara la cosa política. Como el miedo no anda en burro en las elecciones locales de 2014, el PRI capturó la mayoría de las alcaldías y las diputaciones locales y luego en el 2015 las ocho diputaciones federales se las llevaron los tricolores, quienes al contar con los bidones de gasolina suficientes la maquinaria electoral se llevaron troncos y moloncos.

Pero luego en las elecciones del año pasado se cayó a pedazos la estructura priísta perdiendo por primera vez en la historia cívica de Tamaulipas la gubernatura. Es una daga o más bien una lanza, que traen bien atravesada los tricolores por la suposición que el entonces comandante en jefe de ellos paralizó la maquinaria electoral del tricolor y por esa circunstancia tienen razón los que se molestan cuando advierten señales de que EGIDIO TORRE CANTÚ, desde su cueva en San Pedro Garza García, Nuevo León, anda queriendo meter las manos.

Hay quienes creen que lo azuza en esa intentona GUILLERMO MARTÍNEZ, quien fue su coordinador de comunicación social y otras cosas más.

Mucho cuidado habrán de tener los priístas para impedir el manoteo de quien hoy “goza” del repudio de la clase política tricolor porque habrá que decirlo, lo que son las bases no creo le tengan fobia a Egidio pero tampoco han de tenerle afecto. Es más, si se da una vuelta por las colonias no creo que ni lo vayan a reconocer.

Pero por lo pronto ahí están ya las inconformidades independientemente de que ERNESTO GUAJARDO ya se placea y ÓSCAR LUEBBERT levantó la mano, y fue tanto el pánico que sembró que comenzaron a tupirle por las redes sociales tan torpemente que denotaron no ser priístas los autores.

Y allá por Tampico avisan que PALOMA GUILLÉN está puesta y dispuesta.

Qué cosas, después de las elecciones de junio del año pasado no había quien quisiera anotarse para el PRI estatal. Incluso, al comité ejecutivo nacional tampoco parecía interesarle.

Por ello ahí dejaron a AÍDA ZULEMA FLORES PEÑA que por su propio bien tendrá que desligarse de EGIDIO TORRE CANTÚ por mucho agradecimiento que le tenga. Son otros tiempos y por lo mismo otras circunstancias, de ahí que ahora serán otras personas.

Entre tanto, en el PRI local, como lo mencioné, GUSTAVO RICO DE SARO anda encarrilado para la presidencia como también ALBERTO ARREDONDO, que no tiene mucha experiencia dentro de la política pero animoso sí es.

Sin embargo, primero va a ser el Comité Directivo Estatal y cuando venga el municipal en mi personal enfoque deben considerar a un priísta experimentado con vocación por el servicio público y además con una trayectoria limpia. Me refiero al doctor JUAN NOÉ LÓPEZ SOTO.

Y por hoy, BASTA

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