ONG cuestiona a CNDH por falta de contrapeso
Organizaciones civiles cuestionan a la CNDH por su alineación con el gobierno
Organizaciones civiles de derechos humanos cuestionaron el desempeño de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), al señalar que ha perdido relevancia como órgano autónomo y que, en los hechos, se ha alineado con el discurso del gobierno federal, particularmente frente a problemáticas como la tortura y la crisis de desapariciones en el país.
¿Qué cuestionan las organizaciones civiles sobre la CNDH?
En un balance reciente, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) acusó al organismo de respaldar políticas gubernamentales contrarias a estándares internacionales, así como de minimizar violaciones graves y desacreditar el escrutinio de instancias internacionales, como el Comité contra la Desaparición Forzada de la ONU.
De acuerdo con la organización, pese a que la CNDH registró 980 quejas en las que se señala a las Fuerzas Armadas como responsables de violaciones a derechos humanos, sólo emitió una recomendación general y 11 por violaciones graves, la mayoría relacionadas con hechos ocurridos en administraciones anteriores.
Acciones de la CNDH ante violaciones a derechos humanos
En respuesta a estos señalamientos, la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra, aseguró que México atraviesa una etapa histórica de consolidación de los derechos humanos y defendió que la Comisión ha recuperado su papel como auténtica defensoría del pueblo, con una visión preventiva y cercana a las víctimas.
En el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos, Piedra sostuvo que el organismo no sólo atiende quejas y emite recomendaciones, sino que trabaja para reducir las violaciones a derechos humanos y hacer de su respeto una práctica cotidiana, guiada por principios de legalidad, profesionalismo y transparencia.
Reacciones de la CNDH ante críticas de organizaciones civiles
La funcionaria destacó además el trabajo de la CNDH en la prevención de la violencia contra mujeres y niñas, así como su acompañamiento a pueblos indígenas, personas defensoras, jóvenes, adultos mayores y grupos históricamente marginados.
Pese a esta defensa institucional, organizaciones civiles mantienen sus cuestionamientos y advierten que el verdadero reto para la CNDH es recuperar su papel como contrapeso del poder y garantizar una vigilancia efectiva de las autoridades, especialmente en los casos de violaciones graves a los derechos humanos.
