Emplaza Armenta a Piña por 'amenazas'
El presidente del Senado, Alejandro Armenta (Morena), denunció durante la sesión de la Comisión Permanente haber recibido mensajes intimidatorios y amenazantes presuntamente de la Ministra Norma Piña, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN)
El legislador morenista solicitó el uso de la palabra y ante los integrantes de la Permanente mostró en mamparas una reproducción de los mensajes. Uno de ellos fue "¿Usted puede ver a los ojos a sus hijos o hijas después de lo que dice?", presuntamente enviado por la Ministra Piña.
- CIUDAD DE MÉXICO
"No juzgo, no prejuzgo. Quiero informar a este soberanía del hecho. Quiero informar que he enviado un escrito a la Corte", dijo Armenta en un escrito dirigido en realidad a la Ministra Presidenta, Norma Piña.
"El que suscribe, senador Alejandro Armenta Mier, presidente del Senado de la República, me dirijo a usted la manera más atenta y respetuosa para que por su conducto se pueda verificar los siguientes hechos significativos del día 16 de mayo del presente año, toda vez que el ciudadano Francisco Tapia, el cual se acreditó como su asesor, mediante una serie de mensajes de WhatsApp pretendió crear un canal de comunicación entre usted y su servidor", expuso.
"Acto seguido, presuntamente del número telefónico que usted acredita recibí mensajes a las nueve con un minuto con la muy probable intención de presionar, de intimidar o incluso de pretender amenazar al suscrito por mi desempeño como legislador federal, contraviniendo con ello lo dispuesto en el artículo 61 de nuestra Carta Magna".
Armenta solicitó a la Ministra Presidenta que verificara los hechos narrados.
"Mi responsabilidad, al igual que la suya, implica defender la inviolabilidad de nuestros derechos y el libre ejercicio de nuestras atribuciones y competencias", alegó.
El diputado petista Reginaldo Sandoval explicó que esos mensajes los había recibido Armenta como consecuencia de haber propuesto que los Ministros de la Corte fueran electos por el pueblo.
Legisladores de Oposición pusieron en duda el hecho y cuestionaron si no se trataba de una estrategia para desviar la atención ante los resolutivos que ha tomado la Suprema Corte en contra de decisiones tomadas en el Congreso, como el llamado Plan B en materia electoral.