Necesitan en AL una vacuna anticorrupción

Madrid, España

En una entrevista, Rebeca Grynspan, la máxima responsable de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), asegura que dicho problema en América Latina reclama una agenda de alto vuelo, institucional, y debe ser combatida entre otras medidas con códigos éticos, acciones de transparencia y leyes de información pública.

En poco más de un año de su mandato, el panorama en América Latina ha empeorado, tanto en términos económicos como de inseguridad, ¿qué falla?

Parte del rápido crecimiento de la región en el pasado provino de los altos precios de materias primas y alimentos. Esto ha cambiado, pero no hay una crisis macroeconómica generalizada. Hay tres economías -Venezuela, Brasil y Argentina- que crecen muy poco o están decreciendo; pero el resto están creciendo.

¿Cuál es el pronóstico a corto y mediano plazo?

Creo que 2016 será mejor que 2015, pero no vamos a ver las tasas de crecimiento del pasado. No podemos apostar a la primarización de la economía. Por primera vez los sectores medios en América Latina son mayores que los sectores pobres y están pidiendo empleo de mayor calidad, y esto va a llegar de una apuesta por la ciencia, la tecnología, el conocimiento y las cadenas productivas.

En términos de microeconomía la realidad sigue dejando mucho que desear.

Creo que hay que retomar la agenda de pequeñas y medianas empresas. Necesitamos que el sector de servicios sea de mucha calidad y promover inversiones en infraestructura y logística.

¿Cómo devolver la confianza en las instituciones?

Es una preocupación que tienen que compartir los líderes. La modernidad significa someter las instituciones al escrutinio ciudadano y que la ciudadanía no puede suplantar a los órganos electos.