buscar noticiasbuscar noticias

Mensaje motivacional a estudiantes del RGV

Estrella de volibol dirigió un exhorto a los jóvenes sobre beber y conducir

Pharr, Tx.- Mucha gente que maneja ebria no choca, dijo Sarah Panzau, porque tiene suerte. Aunque en su caso fue todo lo contrario el 23 de agosto de 2003.

TESTIMONIO. Sarah Panzau, ejemplo viviente de las consecuencias de mezclar conducir y beber.Mensaje motivacionala estudiantes del RGV

Sarah Panzau, estrella de volibol, visitó varias escuelas de la región, donde poniéndose ella misma como ejemplo vivo de las consecuencias graves de mezclar el beber y el conducir.

Lo más vívido y perturbador para algunos de los jóvenes de la audiencia, fue el evidente daño que sufrió su cuerpo en su propio accidente por conducir ebria.

Las lesiones que casi le cuestan la vida a Panzau la tuvieron en coma durante dos semanas, seguido de un mes en cuidados intensivos con un ventilador y casi 40 diferentes operaciones. Contemplar los resultados resultó fueron demasiado para algunos de los estudiantes más sensibles. Otros incluso fueron traicionados por las lágrimas.

Fue después del accidente que Sarah decidió convertirse en un ejemplo vivo de lo que sucede cuando alguien se pone frente al volante después de una noche de copas.

Panzau hizo una alto en algunas preparatorias del valle en un intento por crear conciencia en los jóvenes a beber de manera responsable.

Panzau también habló de cómo las decisiones pobres pueden tener consecuencias drásticas.

“Cómo estrella del voleibol en la preparatoria, equivocadamente hice muchas malas decisiones, caí en las drogas y el alcohol”.

“A consecuencia del accidente, mi brazo izquierdo fue completamente arrancado de mi cuerpo en el accidente hace casi 14 años”, dijo la mujer a la audiencia. 

En su página web personal, Panzau enumera las lesiones que sufrió en el accidente ocurrido al este de St. Louis: “amputación traumática del brazo izquierdo, una fractura tipo II del maxilar,  mandíbula fracturada, en siete lugares, desprendimiento de toda la parte posterior de la cabeza hasta la arteria carótida y la vena yugular, el lado derecho del pecho, la desarticulación de la rodilla izquierda, la ruptura de tres ligamentos, fractura de la clavícula izquierda y la escápula, desgarramiento hasta el músculo de la zona escapular izquierda, pulmón colapsado, laceración hepática de tercer grado, corte de la oreja derecha a mitad y múltiples otras laceraciones, una embolia pulmonar, que requería una toroscopia y finalmente una toracotomía”.

Panzau continuó diciendo a los jóvenes que hay una muy buena razón para que la edad para beber sea de 21 años: porque el cerebro humano no está completamente desarrollado antes de eso, en particular el lóbulo frontal, que controla la toma de decisiones, es una mezcla peligrosa.




DEJA TU COMENTARIO
PUBLICIDAD

PUBLICIDAD