Declaración de desastre

El Condado Hidalgo y la ciudad de McAllen declararon zona de desastre a la región luego de que se han reportado 422 nuevos casos de Covid-19 junto a dos personas fallecidas, además de un aumento en pacientes admitidos en hospitales. A la fecha 190, de los cuales 51 están en terapia intensiva y la cifra de nuevos contagios está a punto de llegar a los 100 mil.

Y es que la última vez que el Departamento de salud y servicios humanos del condado reportó por encima de 200 casos fue en febrero, por lo que está nueva alza ha encendido los focos rojos en el condado.

Por si fuera poco, a mediados del pasado mes de julio se detectó el primer caso con la variante Delta por lo que las autoridades insisten en que las personas se vacunen.

La ciudad de McAllen ha unido esfuerzos con el condado de Hidalgo para resaltar el estrés que está experimentando el sur de Texas debido al creciente número de migrantes que ingresan al país y son liberados en las comunidades locales.

En su declaración de desastre, funcionarios de McAllen acusaron a varias causas, entre ellas a los migrantes.

La saturación de albergue de Caridades Católicas es una de las causas de este aumento de casos ya que carecen de instalaciones adecuadas, comida, servicios médicos y agua, además de ser un problema de ámbito federal.

Las autoridades locales no han podido acercase a ayudar por lo que es necesaria la declaratoria de desastre lo que les permitirá acceder a más fondos que permitan mitigar este problema.

El juez del condado, Richard Cortez, dijo que la meta es estar en una posición para hacer un reclamo al gobierno federal.

“Tenemos una saturación de personas que es difícil de manejar, están dejando a gente en las calles de nuestra comunidad, algunos que no han sido examinados y no han estado en cuarentena, la declaración de desastre está enfocada en los migrantes que han sido soltados en nuestro condado”.

| La declaración firmada entró en vigor el lunes por la tarde y estará vigente por siete días.