Los gastos ineludibles
La resaca decembrina suele presentarse hasta enero, cuando una avalancha de pagos se viene encima, comenzando con el predial, derechos vehiculares; luego vendrán luz, agua y gas… Ah, y los desembolsos escolares.
Con la llegada del nuevo año y una vez superadas las fiestas del “maratón Guadalupe-Reyes”, los ciudadanos se enfrentan a un buen número de pagos ineludibles e incluso urgentes.
Otro desembolso lo constituye el pago de los derechos vehiculares. Este año no hay reemplacamiento, pero sí se deben cubrir los derechos correspondientes al nuevo año entre ellos tarjeta de circulación y engomado 2015.
El gasto será menor para quienes tienen vehículos con 10 años y más de antigüedad, pues éstos no pagan tenencia, como tampoco lo hacen aquellos automovilistas cuyas unidades no muestran rezagos de años anteriores.
Otros gastos, considerados fijos, pero que en enero se resienten más por los “excesos consumistas” del pasado diciembre, son el consumo de agua potable y la luz eléctrica, así como gas para uso domestico, así como telefonía fija y celular.
Además, en enero deben renovarse las pólizas de los seguros, como el de daños a terceros y mayores, así como el seguro de vida, entre otros.
En enero la actualización del crédito otorgado por el Infonavit también constituye un gasto mayor, pues las mensualidades aumentan.
Quienes tienen hijos en escuelas particulares también deben afrontar las colegiaturas, y alguno que otro incremento.
Encima, los aumentos a diversos productos y servicios, deterioran aún más el poder adquisitivo, tal y como lo puede comprobar cualquiera visitando un supermercado.
Los incrementos más evidentes son al tabaco, goma de mascar, cereales, avenas y algunas carnes frías, además de la mayoría de las carnes rojas que provienen de Estados Unidos.
NI MODO… AL EMPEÑO
Las casas de empeño se han convertido en una opción para quienes buscan salir de deudas ante la avalancha de enero.
Televisores, joyería, aparatos eléctricos, muebles en general y hasta autos, reciben estos comercios a cambio de una parte del avalúo que realizan.
Para muchos, estas casas de empeño proporcionan “dinero rápido” para poder salir de deudas, aunque sus tazas de interés sean en ocasiones, imposibles de liquidar.
“Yo empeñé una televisión de plasma, me prestaron mil 300 pesos y voy a pagar 104 pesos de intereses más 156 de almacenaje” comenta Julia Ramírez.
Si esta ama de casa al cumplirse el mes de su empeño decide recuperar su televisor, tendrá que pagar mil 601 pesos y en caso de refrendar pagará 301 pesos con 60 centavos.
“Lo que pasa es que tengo que pagar el recibo de la luz que es de 800 pesos y pues no los tengo, por eso decidí empeñar mi televisor”.
Comenta que ésta es una buena forma de solventar los gastos que tiene que hacer en el mes de enero, por lo que piensa empeñar también una lavadora, para costear los gastos de gas y agua.
