Lamentos de migrantes

Por lo menos 10 horas tuvieron que permanecer al sol más de medio millar de migrantes a las afueras del albergue Senda de Vida I, en espera de ser atendido por directivos y colaboradores del lugar.

Dos hondureños dijeron que lo preferible es que no los hubieran convocado ahí, sino que les hubieran entregado el documento en el lugar donde están albergados, en este caso en el Senda de Vida II, para no exponer a la gente, sobre  todo a los niños a las inclemencias del tiempo.

Los pequeñines fueron cubiertos con sábanas para protegerlos del sol, en tanto que otros se resguardaban a la sombra de sus papás o sus mamás.

Los migrantes se arremolinaron en torno a la entrada principal del albergue Senda de Vida I, pero alguien de su interior les hizo saber que debían formar una fila, pues de lo contrario no serían atendidos.

HASTA HOY

Mientras continuaban su larga espera bajo los rayos del astro rey, a las afueras del referido albergue corrió la versión entre ellos de que finalmente serían atendidos hasta este lunes.

Según dijeron hondureños que se abstuvieron de dar a conocer sus nombres, solamente unos cuántos fueron ingresados al lugar, en tanto que una gran mayoría debió permanecer a las afueras del mismo.

Mejor comida

• - Molestos por la pobre calidad vitamínica de la comida que les dan a quienes están en Senda de Vida II, algunos de ellos piden al pastor Héctor Silva que mejoren los alimentos porque desde hace meses que reciben únicamente frijoles y arroz y muy de vez en cuando un pedazo de pollo.
• - Piden gestionar buena comida, sobre todo para evitar que los niños  caigan en la desnutrición por la baja calidad de lo que les sirven. Muchos prefieren buscar mejores alternativas y alimentarse por su cuenta.