Hoyo en uno, el tiro soñado
Febrero 22, 2022 -
Mexicano Carlos Ortiz formó parte de un inusual Phoenix Open, donde hubo 2 ases en el mismo hoyo
Ciudad de México
Embocar un hoyo en uno es el sueño de todo golfista... lograrlo solo es una realidad para algunos.
Como su nombre lo indica, este tiro soñado se logra cuando el jugador logra, en un sólo golpe, mandar su pelota al hoyo. Normalmente es más común ver estos tiros de fantasía en los hoyos Par 3, es decir, los más cortos que hay en un campo de golf, sin embargo hay algunas curiosidades que incluso cuesta trabajo creer.
El fin de semana pasado, el tapatío Carlos Ortiz embocó un espectacular hoyo en uno desatando la locura en el icónico TPC Scottsdale, sede del Phoenix Open, en donde hubo una lluvia de cerveza en el festejo de los aficionados. Lo curioso es que Ortiz lo logró un día después de que Sam Ryder lograra el suyo, algo poco usual.
Si bien a nivel profesional, tanto en la máxima gira varonil, el PGA Tour, como en la LPGA, el tour de la élite femenil, hay más probabilidad de que se den este tipo de tiros, la realidad es que los hoyos en uno pueden aparecer a nivel amateur, infantil, senior e incluso de exhibición.
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Eso sí, tan complicado es lograrlo que hay golfistas que se retiran y nunca logran hacer uno a lo largo de su carrera, por lo que si tú logras hacerlo o al menos presenciarlo desde la galería considérate un afortunado en el golf.
MÁS QUE UN GOLPE DE SUERTE
Algunos jugadores pasan toda su vida jugando golf y ni siquiera eso les permite gozar de haber logrado un hoyo en uno.
De acuerdo con un estudio realizado por el National Hole-in-One Registry, de Estados Unidos, un golfista amateur tiene una probabilidad de 12 mil 500 tiros a 1 para hacer un hoyo en uno.
Si hablamos de un jugador profesional, su taza es de 3 mil a 1, mientras que para uno de handicap bajo la media es de 5 mil a 1.
Incluso hay unos datos aún más profundos en el que se tiene un registro de que dos jugadores del mismo foursome tienen una probabilidad de 17 millones a 1 de hacer un hoyo en uno en el mismo hoyo.
O un mismo golfista tiene 67 millones a 1 de posibilidades de hacer dos hoyos en uno en la misma ronda.