Familia que pesa

Guadalajara, Jalisco.

Cada vez lo veían más cerca del triunfo.

Estaba por caer el primer título para Carlos Ortiz en el PGA Tour, y el primero para un mexicano después de 42 años, lo que validaba todas las horas de arduo trabajo.

Y llegó. Pasaron 118 torneos para que el jalisciense consiguiera su primer trofeo de la PGA, al coronarse en el Houston Open.

Y aunque en el green Carlos festejó con su esposa Haley, lejos de él toda su familia lo hacía, pues si de algo se ha valido Ortiz en su carrera es del apoyo que ha recibido de sus seres cercanos.

“Fue algo increíble, había estado trabajando mucho y ya veíamos que estaba muy cerca de hacer el juego como esperábamos que jugara, había estado trabajando en algunos detalles de su juego y ayer (domingo) fue la culminación de muchas horas de trabajo y muchas horas de sacrificios y trabajo duro”, comentó Graciela Becerra, mamá del golfista tapatío.

Chela y su esposo Carlos tuvieron tres hijos, dos de ellos, Carlos y Álvaro, decidieron dedicarse al golf, mientras que Alejandro tomó el camino de las finanzas.

La pareja ha estado de cerca de las carreras de sus hijos no sólo con la función de papás, pues ellos mismos los involucraron en el mundo del golf, sino que Chela incluso dedicó mucho tiempo a planear la logística de los viajes de sus hijos golfistas y acompañarlos siempre que podía.

“Estamos muy felices porque nos toca verlo de cerca todo el tiempo que ha dedicado, todos los sacrificios que ha hecho y el trabajo arduo que ha venido haciendo desde hace muchos años y esto es la culminación de esto”.

¿Cuál fue la clave para que Carlos lograra el título en el Houston Open?

“Sobre todo fue mucha paciencia, estar en el presente, era un campo muy difícil y castigaba mucho los tiros erróneos, alrededor del green fue espectacular, cuando fallaba green por lo general hacía el ‘up and down’ y creo que la clave fue estar paciente y creer en él”.

Se acuerda cuando Carlos cambió de driver, ¿esto influyó en algo?

“Fue su segundo año cuando estuvo en la PGA y más que todo lo hizo regresar a la segunda división del golf, pero si en aquel momento lo veíamos como una desgracia, creo que fue lo mejor que le pudo haber pasado, ya que el haber regresado a la segunda división lo hizo trabajar más duro, enfocarse más y saber realmente por dónde tenía que ir para ser lo suyo, no hacer lo que los demás hacen, cada quien tiene su camino para llegar a la cima y gracias a eso, Carlos está donde está ahora.

¿Es un parteaguas en la carrera de Carlos? ¿Qué viene ahora para él?

“Él sabe que va por el camino correcto, pero esto te valida, te dice que sí estás sobre todo porque no fue un torneo cualquiera el que ganó, estaban grandes nombres, estaba el número uno del mundo en el field y eso hace que valga más el triunfo”.