Exigen enfermeras profesionalización

INCONFORMES. No se ha reconocido a quienes han logrado estudios profesionales en el sector Salud.

México, D.F.

Mientras que en países desarrollados sólo ejercen la enfermería quienes tienen una carrera universitaria, en México la atención es a nivel técnico y no hay estímulos para profesionalizar a este sector.

El 71 por ciento de las enfermeras y enfermeros del país son auxiliares, técnicos y postécnicos, y sólo el 29 por ciento cuenta con estudios a nivel licenciatura o tiene un posgrado, según datos del Sistema de Información Administrativa de Recursos Humanos de Enfermería de la Secretaría de Salud.

Guadalupe Leyva, jefa de la División de Educación Continua y Desarrollo Profesional de la Escuela Nacional de Enfermería y Obstetricia de la UNAM, asegura que en México los planes para estimular la profesionalización de este sector son escasos.

“El grave problema es que salen auxiliares, salen técnicos, salen licenciados y los ponen a hacer las mismas funciones”, indica en entrevista.

“Las instituciones de Salud quieren que estos auxiliares o estos técnicos hagan lo que un profesional. Es como pretender que, si no hay médico, que haga la cirugía, lo haga alguien más”.

En el Sistema Nacional de Salud, únicamente los Hospitales de Alta Especialidad y los federales de la Secretaría de Salud cuentan con programas de profesionalización, en los que, con salario y escalafón, se reconoce el grado académico.

Sin embargo, critica Leyva, en el IMSS y el ISSSTE, que en conjunto aglutinan a la mayoría de los derechohabientes, carecen de este programa.

 “El Seguro Social todavía tiene un problema más serio. Para que los licenciados puedan optar por un cambio de nivel tienen que bajarse al nivel técnico, pues deben hacer un postécnico, es decir, un año de carrera técnica especializada para que entren a un programa de promoción laboral; le llaman escalafón”, externa.

“En el ISSSTE es igual, no hay plazas para licenciados. Tienen el mismo trato”, afirma.

Para la especialista, hace falta reorganizar la estructura organizacional del sistema de salud.

“Se sigue trabajando como hace 100 años. Hoy tenemos que tener perfiles de puestos. Se tiene que estratificar el cuidado y determinar qué va a hacer un profesional, qué va a hacer un técnico, que va a hacer un auxiliar. Que convivan, pero cada uno en su ámbito”, propone.

De acuerdo con Leyva, los hospitales del país requieren elevar el número de enfermeros profesionales para disminuir riesgos y evitar poner en peligro la vida de los pacientes.

“Lo ideal sería tener cuando menos una enfermera con licenciatura en cada una de las áreas que vaya guiando el cuidado profesional con los técnicos y auxiliares”, estima.

A  la falta de estímulos para profesionalizar al gremio, se suman el déficit de enfermeras y las condiciones de precarización en las que laboran, señala José Antonio Vital, coordinador de la Alianza de Trabajadores de la Salud y Empleados Públicos.

Según estadísticas de la OCDE sobre la salud 2014, el número de enfermeras  en México era de 2.6 por cada mil habitantes, cifra que está muy por debajo del promedio de la OCDE, de 8.8.

Ese rezago origina una sobrecarga de trabajo que repercute en la atención del paciente.