Urgen resguardar murales del Centro SCOP
Los murales artísticos que revisten el Centro SCOP, inmueble de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) desalojado en 2017 por los daños que le produjo el sismo de ese año, acumulan deterioros que solo podrán frenarse si se desmontan
CIUDAD DE MÉXICO
"Lo fundamental es retirar, con expertos, los 4 mil 468 metros cuadrados que faltan, catalogarlos y almacenarlos antes de que continúe el deterioro de los murales", puntualizó en entrevista el arquitecto y académico de la Universidad Autónoma Metropolitana.
De los 6 mil 85 metros cuadrados de murales que recubrían la antigua sede de la SCT, se retiraron más de mil 600 en 2018.
Las obras sin desmontar no sólo permanecen a la intemperie y sin mantenimiento, sino que pueden colapsar junto con los edificios, previno Alcántara.
REFORMA constató durante un recorrido que los murales presentan desprendimientos, acumulación de humedad, manchas y suciedad, entre otros deterioros que se suman a la vulnerabilidad del sitio.
De acuerdo con un dictamen del Instituto para la Seguridad de las Construcciones de la CDMX (ISC), las edificaciones del complejo presentan "alto riesgo de colapso". (REFORMA 22/10/2018).
Un sitio con valor patrimonial
El conjunto arquitectónico de la colonia Narvarte fue construido entre 1952 y 1954, a partir del diseño de los arquitectos Carlos Lazo, Augusto Pérez Palacios y Raúl Cacho.
Los murales de mosaico en piedra, vidrio y cerámica que lo recubren son obra de José Chávez Morado, Juan O'Gorman, Jorge Best, Arturo Estrada, Luis García Robledo, José Gordillo, Guillermo Monroy y Rosendo Soto; dispone además de esculturas de Francisco Zúñiga y Rodrigo Arenas Betancourt.
Testimonio de integración plástica, las cualidades del Centro SCOP ameritan la declaratoria de Monumento Artístico, destaca Alcántara, propuesta que presentó en 2019, durante una reunión que convocó, entre otros, a Lucina Jiménez, titular del INBAL; Javier Jiménez Espriú, entonces al frente de la SCT, y Renato González Mello, académico del Instituto de Investigaciones Estéticas de la UNAM.
Especialista en restauración de monumentos y centros históricos, Alcántara sugirió entonces una declaratoria provisional, mientras se integraba el expediente definitivo que reconocería el Centro SCOP como Monumento Artístico, un estatus que además de protegerlo podría sumar recursos públicos y privados para su rescate.
"En 2021, Dolores Martínez (Subdirectora de Patrimonio Artístico Inmueble del INBAL) refirió que estaban elaborando el expediente, pero aún no se declara Monumento Artístico", informó.
El SCOP ameritaría Igualmente la declaratoria de Patrimonio Cultural de la Ciudad de México, consideró el presidente del ICOMOS.
Llamado en Defensa del Centro SCOP
Respecto de las cualidades del conjunto arquitectónico -inscrito en la relación del INBA de Inmuebles con Valor Artístico- González Mello ha señalado:
"Es una de las realizaciones más significativas de la corriente artística que promovió la integración plástica, una filosofía estética y constructiva que atraviesa lo urbano, lo arquitectónico, lo escultórico y lo pictórico, y que a su vez culmina un largo proceso teórico que caracterizó al muralismo mexicano".
Alcántara consideró que la SCT podría donar el inmueble a la Ciudad de México para convertirlo en un espacio cultural y natural, en el contexto del Centenario del muralismo en el País.
En 2018, el Alcalde de Benito Juárez, Santiago Taboada, propuso que el lugar funcionara como un Centro Nacional de las Artes (Cenart), provisto de áreas verdes.
Mientras se define su destino, el tiempo y los sismos apremian, como lo han hecho saber a las autoridades tanto el ICOMOS como el movimiento en Defensa del Centro SCOP.
En una carta enviada a Taboada el pasado 13 de septiembre, Alcántara consideró que un uso cultural -destinado a la enseñanza, práctica y difusión de actividades artísticas- integraría el espacio a la comunidad y lo dignificaría "como inmueble patrimonial, apreciado como parte importante del muralismo y la plástica mexicana", se lee en la misiva.
En Defensa del Centro SCOP envió, el 28 de septiembre, una carta a la titular de Cultura del Gobierno Federal, Alejandra Frausto, y a la directora del INBAL, Lucina Jiménez, en la que demandan información sobre el proceso de declaratoria de Monumento Artístico para el Centro SCOP y, ante el prolongado "silencio institucional", solicitan una reunión de trabajo.
Vecinos resienten inseguridad; piden consulta
Vecinos de la Unidad Habitacional IMSS Narvarte, conocida como SCOP por su proximidad con la antigua sede de la Secretaría de Comunicaciones y Obra Pública -hoy de Comunicaciones y Transportes- proponen una consulta que defina el destino del inmueble, desocupado por la dependencia desde los sismos de 2017 y hoy en el abandono.
"Sería bueno promover una consulta, ahora que están de moda, para ese tema", sugiere Miguel, de 53 años, quien trabaja en la industria de seguros y manifiesta su preocupación, porque el abandono del conjunto representa un doble riesgo: de un eventual desplome, sobre todo de la torre, y de inseguridad, al convertirse en guarida de "personas extrañas".
REFORMA constató durante un recorrido que indigentes se han instalado en distintos puntos del conjunto, por ejemplo en la puerta de Xola y en Eje Central Lázaro Cárdenas.
La vigilancia no es suficiente para evitar el vandalismo en algunas áreas del Centro SCOP, que presentan grafiti.
Miguel lamenta también la falta de mantenimiento del sitio provisto de murales artísticos que debería, opina, convertirse en un parque o en espacio recreativo público, no un centro comercial, como ha sucedido con varios predios de la Ciudad.
Su acompañante, vecina también de la Unidad SCOP, advierte que el terreno no resistiría más construcciones si decidieran establecer allí un centro comercial, destino que además generaría basura, y coincide con Miguel en que debe organizarse una consulta.
Martha Rangel, de 54 años, farmacéutica industrial y habitante también de la unidad habitacional, considera el lugar propicio para un área pública verde de grandes dimensiones, porque alrededor solo se encuentran microparques.
"Sería un bonito regalo de la Ciudad para nosotros", opina.
Sugiere arquitecto Saúl Alcántara, de ICOMOS, estudio a fondo
El rescate del conjunto arquitectónico requeriría, entre otros procesos, los siguientes, indica el arquitecto Saúl Alcántara:
-Analizar la capacidad de carga de cada uno de los edificios que integran el conjunto.
-Efectuar estudios de geotecnia para conocer la condición del suelo.
-Evaluar la necesidad de demoler niveles para reducir alturas de las edificaciones, como se hizo en 1985, cuando también resultó afectado el conjunto arquitectónico, o bien valorar si pueden reforzarse éstas con fibra de carbono.
-Realizar un levantamiento con escáner láser del predio que permitiría a la vez una valoración de las condiciones del mismo y un registro de los murales.
-Diseñar un Plan Maestro para la recuperación del conjunto arquitectónico, incluidos sus murales.