Le llueven críticas
Caza de brujas aborda temas complejos sobre relaciones en la universidad, pero no logra captar el interés del crítico.
Hay sobredosis de estrenos en esta golosa época cuando se supone que el desnutrido público tiene ganas de volver al cine. Y todo dios se empeña lógicamente en colocar a sus criaturas en las salas al mismo tiempo.
Excepto la arrogante y todo poderosa Netflix, que pasa cantidad de colocar a sus productos en los cines, o lo hace durante unos días en salas escasísimas y periféricas para ofrecerlas a las dos semanas en su babilónica y masiva plataforma. Su fastuoso negocio está seguro. Malos tiempos para ese ritual tan antiguo e hipnótico de ir al cine, de ver las películas en su lugar natural, en una gran pantalla, en silencio, rodeados de oscuridad.
¿Cuál es la opinión de Carlos Boyero sobre la película?
Y entre tantas películas con cierto gancho inicial, me toca acercarme a la menos atractiva. Para mis gustos, por supuesto, ya que su creador, Luca Guadagnino, goza de fervores críticos, y Hollywood, siempre a la caza de talentos europeos que le otorguen prestigio artístico, se ha colocado a sus pies desde hace tiempo.
A mí, su estilo expresivo y sus temáticas me provocan mucho tedio. Con la excepción de una maravillosa conversación sobre la vida entre un padre humanista y su adolescente y desconcertado hijo en Call Me By Your Name.
El resto de su cine me mosquea o me irrita. El único atractivo inicial de Caza de brujas es que la protagoniza Julia Roberts, a la que siempre me gusta observar y escuchar. Además de estrella, es una actriz convincente, siempre me la creo. Posee imán, belleza y personalidad. Sin embargo, aquí me resulta indiferente, aunque cuentan que puede aspirar al Oscar. Va de intensa y misteriosa.
Le han teñido el pelo de un color extraño, pretenden hacer inútiles cambios en su privilegiada fisionomía. Y esas cosas, junto a lo de interpretar a gente con enfermedades físicas o mentales, siempre enamoran en los Oscar de interpretación. La de Julia Roberts aquí no me conmueve lo más mínimo. Al igual que el resto de la trama y de los personajes.
¿Qué aborda la trama de Caza de brujas?
Guadagnino intenta dotar de suspenso y plantear interrogantes sobre las relaciones sexuales consentidas o forzadas en la universidad de Yale, entre una chica negra e hija de un millonario y un profesor relativamente joven. Y se supone que ocurren muchas cosas morbosas en lugar tan selecto, sabio y caro, con el poder que se puede adquirir logrando el cargo de profesor titular.
El director juega a la intriga, pretendiendo ser inquietante, pero todo se queda en pretencioso. Rodada con un estilo visual tan sofisticado como ineficaz. Sin contagiarme el menor interés hacia las continuas sombras, contradicciones y paradojas que pretenden inyectar a la turbia historia. No existe ni un solo personaje del que me preocupe su presente o su futuro, algo imperdonable en un cine que pretende ser psicológico, complejo, retorcido, con aristas, lleno de dudas.
¿Cuál es la crítica de Carlos Boyero sobre la película?
Carlos Boyero, crítico de cine, habla de la última película de Julia Roberts, Caza de brujas. Una cita que califica como la "menos atractiva" de las que hay, según sus gustos, y que llega a los cines además en una época "golosa" en la que considera que hay una "sobredosis de estrenos" y con el público deseoso de volver a las salas.
Boyero reconoce el éxito de su creador, Luca Guadagnino, y afirma que "el único atractivo inicial" de esta película es que la protagoniza Julia Roberts, a la que siempre -apunta- le gusta observar y escuchar.
