Demandan regulación real de uso de la fuerza
Junio 06, 2020 - 05:56 p.m.
El colectivo #SeguridadSinGuerra urgió a que las autoridades implementen una regulación seria y real sobre el uso de la fuerza por partes de agentes de seguridad
En un comunicado, advirtió que tan sólo en este año se ha hecho público el asesinato de cuatro personas a manos de uniformados.
"Elementos de la Policía capitalina patearon y pisaron la cara de una menor de edad, durante las manifestaciones contra el abuso de la fuerza", señaló.
"En los últimos días se han hecho públicos distintos casos especialmente brutales de abuso en el uso de la violencia del Estado por parte de sus agentes. En México, los casos de abuso de la fuerza y tortura son frecuentes y muestran la manera en la que los agentes del Estado ejercen violencia, sin sujetarse a controles legales ni protocolos de actuación".
#SeguridadSinGuerra insistió en el papel que ha tenido el despliegue de las Fuerzas Armadas en el incremento de la violencia, la violación de los derechos humanos y la tasa de homicidios en México, por lo que urgió formar policías civiles, sujetos a controles externos.
"También hemos insistido en la necesidad de una regulación seria y real sobre el uso de la fuerza letal y no letal por parte de los agentes de seguridad", añadió.
En su posicionamiento, mencionó el caso de Giovanni López López, quien fue asesinado en Ixtlahuacán de los Membrillos, Jalisco, por presuntamente no usar mascarilla.
"Su cadáver mostraba huellas de tortura y heridas de arma de fuego", refirió.
También señaló que a finales de marzo, en Tijuana, Baja California, Yair López fue asfixiado por los policías que lo detuvieron.
"Un caso que se asemeja al de George Floyd, que ha conmocionado y provocado protestas alrededor del mundo", mencionó.
El último de los casos que enlistó es el de Melisa Anahí, de 19 años, y Cristo Fernando, de 17, quienes perdieron la vida en Carbó, Sonora, el 25 de enero, por no detenerse en un retén militar.
La Encuesta Nacional de Población Privada de la Libertad del Inegi 2016 y los análisis del World Justice Project (WJP) dan cuenta de la tortura y malos tratos de las corporaciones de seguridad.
El 88 por ciento de los detenidos por la Marina y el 85 por ciento de los capturados por el Ejército afirmó que fue víctima de abusos.