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Enrique Bonilla, presidente de la Liga MX, dijo que los jugadores de los Tiburones aún no han definido si se presentarán o no al duelo ante Tigres este próximo viernes, pero sí dejó claro que, en caso de no acudir al encuentro, la franquicia descenderá automáticamente y se iniciará el proceso de desafiliación.

“No sé que decidan (si meten controversia o no juegan). En primera, en la plática me dijeron ellos que quedaban en ‘stand-by’, que iban a pensar, pero en ese momento no tomaban la propuesta que les hacíamos como Liga, y en el caso que se metan las controversias, entre más rápido mejor, buscaríamos que se cumpla con los tiempos establecidos en el reglamento, es decir, buscaríamos que antes de terminar la fase de clasificación se dictaminara”, expresó Bonilla.

El directivo dijo que hay una problemática en el caso de Tiburones, ya que la mayoría de los jugadores tienen un contrato firmado en la Federación Mexicana de Futbol y además tienen un acuerdo verbal con la directiva de Tiburones, y ese acuerdo es el que no se puede pelear en tribunales o en controversias.

“Si Veracruz no se presentara a jugar el viernes, pues el reglamento es claro: el Club que no se presenta a la competición, desciende automáticamente y se iniciaría el proceso de desafiliación”.

Bonilla dejó claro también que, caso que esto suceda, que Veracruz no se presente y descienda, sería el único club que iría al descenso, por lo que Chivas se salvaría este año futbolístico.