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Consideran héroes a rescatistas que laboran en alud de Guatemala

El hedor y el polvo son penetrantes en la zona del siniestro, tras seis días de búsqueda y rescate de víctimas del alud que provocó la muerte de al menos 186 personas y la desaparición de unas 300.

Como verdaderos héroes en una situación de emergencia, cientos de rescatistas en turnos de trabajo coordinados por el gobierno guatemalteco, continuaron labores este miércoles bajo un calor intenso en el área devastada por el deslave que arrasó unas 125 viviendas.

El alud se produjo la noche del pasado jueves en la aldea El Cambray II, del municipio de Santa Catarina Pinula, a 20 kilómetros de la capital. Según las autoridades guatemaltecas, el siniestro fue propiciado por las intensas lluvias de la temporada invernal.

El paso constante de los socorristas por la empinada entre el puesto de mando y la llamada “zona cero”, con los cuerpos y restos humanos extraídos del derrumbe, ha disminuido de manera significativa en el sexto día de labores.

Sin embargo el olor penetrante de la descomposición se siente en el fondo de la hondonada, donde el calor es intenso hasta la tarde cuando refresca, entre la polvareda que levanta la maquinaria pesada que remueve miles de toneladas de tierra y piedra.

El trabajo ordenado y programado por turnos y áreas sobre una superficie de 17 mil 600 metros cuadrados, tiene como principal objetivo localizar y recuperar cuerpos.

La sacrificada labor de los brigadistas es animada sobre todo por encontrar algún sobreviviente, que a estas alturas sería un auténtico milagro, luego de más de 130 horas de ocurrido el desastre natural.

“Por protocolos internacionales en este tipo de evento se considera que las 72 horas posteriores son vitales para encontrar sobrevivientes. Luego de ese lapso las posibilidades llegan a ser nulas”, dijo a Notimex el vocero de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), David de León.

Luego de horas de trabajo para su ubicación, del lugar fueron rescatados uno a uno los cadáveres y restos de personas.

En la morgue instalada en un salón comunal de Santa Catarina Pinula han sido recibidas 186 personas fallecidas hasta el sexto día de la emergencia natural, y se estima que al menos 300 están soterradas en El Cambray II.

En medio de la tragedia, la solidaridad ha prevalecido. Miles de voluntarios y de donantes se han hecho presentes para aliviar el dolor de cientos de familias de las víctimas y de los damnificados.

En este sentido, propios y extraños en Guatemala han reconocido la solidaridad del gobierno mexicano, el primero y el único de la comunidad internacional que envió a un grupo de rescatistas, debidamente probados en estas lides.

La ayuda concreta llegó en el segundo día de la emergencia: una delegación de 64 expertos en crisis por desastres naturales provenientes de las secretarías de la Defensa, Marina, Gobernación, Relaciones Exteriores y de la Policía Federal.

El trabajo de la delegación del gobierno mexicano de rescatistas especializados es reconocido por los guatemaltecos, golpeados por una tragedia que enluta al país centroamericano.

“Agradecemos la loable labor” de los socorristas guatemaltecos y “de la Misión Mexicana Gubernamental que se encuentran trabajando en el país” como una muestra de solidaridad, indicó en un comunicado la Conred este miércoles.

El presidente de Guatemala, Alejandro Maldonado Aguirre, llamó al mandatario de México, Enrique Peña Nieto, para agradecerle por la colaboración del contingente de rescatistas y solicitarle otro apoyo.

La solicitud fue respondida de manera positiva. Conred, que coordina los trabajos de la emergencia por el alud, informó este miércoles que llegaron al país “dos personas expertas” del sistema de Protección Civil de México.

Los dos técnicos mexicanos formarán parte del “equipo de evaluación geológica, hidrológica y de estabilización de suelos”, que trabajará en la zona del desastre en El Cambray II.

El contingente de 64 experimentados rescatistas enviados por el gobierno mexicano es apoyado por 16 perros entrenados en la localización de sobrevivientes y de cadáveres.

Estos últimos son ubicados por los canes, de la raza pastor belga, debido a su preparación con “seudoaromas” de cuerpos en descomposición.

Los perros como “Mítico”, uno de los diez perros del Ejército mexicano traídos a Guatemala, han destacado en los reportes de los medios de comunicación sobre la tragedia.

La solidaridad y el trabajo de la delegación mexicana es reconocida en general por los guatemaltecos y los medios de prensa que reconocen su aporte.

“Gracias a cada socorrista desde los de Conred, y miles de bendiciones a los hermanos mexicanos por su gran apoyo a las familias” guatemaltecas “que salieron damnificadas”.

“Sin descanso” trabaja la delegación del gobierno mexicano en busca de salvar vidas, aunque “han encontrado más las sombras de la muerte”. “Gracias México por compartir nuestro dolor”, son algunos de los mensajes difundidos por guatemaltecos en redes sociales.


Consideran héroes a rescatistas que laboran en alud de Guatemala


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