Congreso pide retirar apoyo a Estados Unidos
Junio 21, 2018 -
Inconforma la política migratoria de D. Trump
Ciudad de México
Por separado, el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, reconoció como una buena noticia del gobierno de Estados Unidos la firma de un decreto para evitar la separación de las familias y enfatizó que la política de “tolerancia cero” implementada por la administración Trump es cruel e inhumana.
En Twitter, Videgaray aseguró que independientemente de este decreto firmado por el propio Trump, el gobierno de México continuará brindando protección consular a los menores en situación vulnerable.
En tanto, la Comisión Permanente del Congreso de la Unión acordó la integración de un grupo plural para que viaje hoy a Washington, entable diálogo con sus colegas en el Capitolio “y resuelva esa lamentable situación a la brevedad posible”.
Este jueves salen a la capital de Estados Unidos los senadores y diputados José María Tapia (PRI), Luis Humberto Fernández Fuentes (PT), Angélica de la Peña Gómez (PRD), Juan Blanco (PAN) y Sofía González Torres, entre otros que sean designados por sus bancadas, con la misión de entablar contactos con sus contrapartes en el Congreso “para que detengan la acción inhumana y criminal de separar a las familias migrantes”.
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La oposición conformada por PAN y PRD expuso en tribuna que ya no es tiempo de retórica, sino de acciones y establecieron que es indignante el trato al que están sometidos los niños mexicanos y de otras nacionalidades.
El senador panista Jorge Luis Preciado Rodríguez sugirió el retiro del embajador, como México lo hizo en un momento del conflicto de Trump con el presidente de Corea del Norte, Kim Jong-un, y ahora que ambos tienen acuerdos, afirmó, “México queda en vergüenza, como el que se mete en los pleitos de casados”.
El diputado perredista Agustín Basave lamentó que a la primera propuesta, de abril pasado, de retirar la cooperación mexicana en temas bilaterales, no pasó nada, y preguntó si esta segunda vez que se apoya al Ejecutivo para actuar ante el presidente de Estados Unidos no se trata de “una pantomima acordada”.