Celebra aniversario Centro Humanitario
Proporcionan a familias toda clase de ayuda como comida y ropa limpia
McAllen, Tx. - El Centro de Rescate Humanitario está celebrando su tercer aniversario. Las Caridades Católicas del Valle del Río Grande abrieron el centro en el salón parroquial de la Iglesia del Sagrado Corazón en el centro de McAllen en respuesta a la afluencia de familias centroamericanas huyendo de la violencia, las condiciones económicas pobres y los desastres naturales en sus países de origen.
Más de 72 mil 200, principalmente de Honduras, Guatemala y El Salvador, han sido atendidos desde que el centro abrió sus puertas el 10 de junio de 2014.
La hermana Norma Pimentel, directora ejecutiva de Caridades Católicas del Valle del Río Grande, dijo que el centro simboliza y celebra el corazón de la comunidad del Valle del Río Grande, que ha mostrado su solidaridad y compasión en todo momento.
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Las aprensiones en la frontera han caído un 37 por ciento durante el año fiscal 2017, de acuerdo con la Aduana y la Protección Fronteriza lo que se traduce en números significativamente más en el centro.
En su apogeo, el centro atendía a casi 400 personas al día. En los últimos días, el número ha caído dígitos simples. La mayoría de los días, sin embargo, un pequeño grupo llega por la tarde.
Aunque las cifras han bajado, el apoyo de la comunidad se ha mantenido.
En 2014, las familias se resguardaban en la estación de autobuses sin nada para comer o beber, ropa para cambiarse o un lugar para ducharse o dormir. Eran las familias habían sido detenidas por la Oficina de Inmigración y Aduanas de los Estados Unidos, y posteriormente liberadas con una cita en la corte y dejadas en la estación de autobuses con permiso para continuar a sus destinos finales.
La religiosa abrió el centro de respiro en la Parroquia Sagrado Corazón, ubicada a sólo dos cuadras de la estación de autobuses, para proporcionar comida, ropa limpia, duchas, atención médica, suministros para el camino, llamadas telefónicas, un lugar para pernoctar y más para los inmigrantes.
Pimentel dice que el apoyo ofrecido por la ciudad y cientos de voluntarios de cerca y de lejos y de numerosas organizaciones, incluyendo el Ejército de Salvación, diferentes grupos religiosos y organizaciones, hacen posible el trabajo del centro.
El centro simboliza y celebra el corazón de la comunidad del Valle del Río Grande, que ha mostrado su solidaridad y compasión en todo momento*. Norma Pimentel, Directora ejecutiva de Caridades Católicas