Aumentan ataques en Israel y Cisjordania
Octubre 08, 2015 - 11:56 a.m.
Los llamamientos a la calma de los Gobiernos israelí y palestino de Benjamín Netanyahu y Mahmud Abbas no parecen haber surtido efecto para frenar la ola de violencia que amenaza con desencadenar una nueva intifada.
Notas RelacionadasCrece ola de violencia palestino-israelíVetan paso de palestinos a Ciudad ViejaAsesinan a dos en un ataque en IsraelVive Israel estado de alertaSeis personas resultaron heridas este jueves en Jerusalén, Tel-Aviv y cerca de una colonia en Cisjordania ocupada, en tres ataques distintos con arma blanca, durante los cuales un atacante fue abatido, indicó la Policía y el Ejército.
Los ataques se extendieron desde la Ciudad Santa y Cisjordania a poblaciones del centro y el sur de Israel, donde se han producido ocho agresiones con arma blanca desde el pasado sábado.
Otros atacantes fueron tiroteados y detenidos por las fuerzas de seguridad. Centenares de jóvenes palestinos resultaron heridos, además, en los disturbios que se reproducen a diario en Cisjordania y Jerusalén Este.
En este clima cercano al levantamiento, responsables de seguridad palestinos e israelíes han mantenido reuniones para intentar impedir que la violencia se desborde.
El Presidente palestino, Mahmud Abbas, condenó los ataques y pidió contención en una entrevista concedida al diario israelí Haaretz.
Fuentes de los servicios de inteligencia israelíes citadas por Yediot Ahronot destacan que las fuerzas palestinas están cooperando con el Ejército israelí para intentar rebajar la tensión.
El Gobierno de Netanyahu suprimió las restricciones de acceso para los palestinos a la Explanada de las Mezquitas y prohibió a los ministros y diputados israelíes, entre los que se incluyen los miembros de la Lista Conjunta Árabe, que visiten ese recinto islámico de la Ciudad Vieja de Jerusalén para evitar provocaciones.
Varios miembros del Gabinete acudieron durante las últimas fiestas judías a la Explanada de las Mezquitas, donde también se sitúan los restos de los templos bíblicos del judaísmo, en medio de las protestas de los palestinos por el aumento de la presencia de judíos en el considerado tercer lugar sagrado del islam.
Mientras, el Alcalde de Jerusalén, el populista Nir Barkat, ha recomendando a los ciudadanos que poseen armas que salgan con ellas a las calles para reforzar la seguridad.
Sectores nacionalistas, que representan a los colonos de los asentamientos en Cisjordania, mantienen una protesta desde el lunes ante la residencia del Primer Ministro en Jerusalén.
"Los civiles israelíes deben permanecer en estado de máxima alerta y mantener la sangre fría", advirtió Netanyahu, que se vio obligado a cancelar una visita oficial a Alemania ante la escalada de la violencia.
La sensación de inseguridad entre los israelíes se ha extendido por el país. Además de Jerusalén, escenario habitual de la tensión entre israelíes y palestinos, en la habitualmente tranquila llanura costera del centro del país se han producido acuchillamientos en Tel Aviv y su región metropolitana y de Ashkelon.
A todo ello se suman los disturbios protagonizados por árabes israelíes, por primera vez en 15 años, en Jaffa y Lod, en las inmediaciones de Tel Aviv.
