Ante una nueva etapa en su vida
Hugh Jackman deja atrás su papel de Wolverine y se siente más libre que nunca
Nueva York, Estados Unidos.
Hugh Jackman tenía 29 años cuando cumplió el único sueño que había anhelado toda su vida: actuar en el Royal National Theatre de Londres. Todo lo que ha venido en los 21 años siguientes, lo considera un extra. Lo dice desde la humildad y la sinceridad, dos cualidades que le han concedido el sobrenombre de el tipo más simpático de Hollywood.
Por eso ahora se siente libre de dar el giro hacia la carrera que desea. Este cambio, que lleva gestándose varios años, incluye todo tipo de géneros: drama en el cine con “El Candidato”, que se estrenará el próximo 22 de febrero y su regreso a los escenarios, el lugar donde se siente más cómodo.
DE ACTOR A CANTANTE
Esta vez Jackman lo hará con un espectáculo en solitario: “The man. The music”. The show”, que lo llevará el próximo verano por estadios del mundo cantando sus grandes éxitos.
Más de la sección
“No soy una persona que tienda a marcarme objetivos”, dijo en 2013 antes de recoger el Premio Donostia a su carrera. “Si me los hubiera puesto hace 25 años, habría cumplido ya todos. Las metas te limitan mucho. Trabajas muy duro para llegar a ellas y te dejas cosas por el camino. Es mejor estar abierto a diferentes ideas. Mi objetivo como actor, si tuve uno, era y ha sido pagar el alquiler, mis facturas”.
Los únicos límites que se ha encontrado son los que otros le han puesto a lo largo de su trayectoria cuando se han empeñado en etiquetarlo.
“He tomado decisiones sobre hacer obras o películas con las que no estaban de acuerdo los que me rodeaban. Según mi experiencia, no puedes controlar todo lo que va a pasar. Por ejemplo, nadie esperaba que Wolverine fuera un éxito”.
DICE NO A LA POLÍTICA
Nueve meses después de despedirse del mutante Logan, estrenó “El Gran Showman”, el primer musical de gran presupuesto producido por un estudio en décadas, cuya banda sonora sigue arrasando. También había conseguido ya su nominación al Óscar por “Los Miserables” (2012).
“Soy un libro abierto”, decía durante la promoción de “El Candidato”, el filme más serio de toda su filmografía, donde interpreta a Gary Hart, el político a quien un escándalo personal hundió su carrera. A diferencia del personaje que interpreta, Jackman se entrega en las promociones. Se refiere a su mujer, Deborra-Lee Furness, como el pilar de su vida, habla del cáncer de piel que le ha atacado en varias ocasiones y de sus planes a los 50 años, pero dice tajante no a la política, a pesar de la simpatía que sabe despierta.
“Tienes que saber manejar mucha impopularidad. Creo que requiere un gran intelecto, una gran perspectiva, creatividad y claridad de visión. No creo que tenga nada de eso”, dice.
Vuelve más maduro
El actor define a su mujer como ‘el pilar’ de su vida y descarta dedicarse a la política.