Viven trabajadores doble drama aéreo

En poco más de una década han tenido que enfrentar el cese de operaciones no sólo de la que fuera la aerolínea más antigua del País, sino también de Interjet

Ciudad de México

Si hay quienes saben de resistencia, son los trabajadores de la extinta Mexicana de Aviación.

En poco más de una década han tenido que enfrentar el cese de operaciones no sólo de la que fuera la aerolínea más antigua del País, sino también de Interjet, donde creyeron encontrar refugio para emplearse y que por malos manejos financieros los volvió a dejar en la calle.

‘”(En 2020), la mayoría de los ex empleados de Interjet nos echamos un año sin cobrar, sin volar y todavía trabajamos hasta el cierre de operaciones sin sueldo, bajo promesas, engaños”, contó un piloto aviador de la línea aérea. 

Una pesadilla similar la había enfrentado el 28 de agosto de 2010, cuando vivió el aterrizaje obligado de Mexicana, que lo orilló a vender su casa.

“(En ese entonces) tuve que vender la casa donde vivía para solventar las deudas que tenía y sobre todo no tener que seguir pagando esa casa”, relató. 

La historia se repitió el 11 de diciembre de 2020, cuando Interjet, quien lo contrató años atrás, dejó de volar por los problemas financieros que arrastraba desde 2018.

“(Ante eso), me dediqué a vender huevos, vendí los coches, platiqué con la casera para no pagar renta y que no nos sacaran de la casa. Fue una maroma espantosa que ya habíamos vivido de alguna manera y te quedas impotente porque ves que la Secretaría del Trabajo no hace nada por ti, demandas hay y nunca intervienen”, dijo. 

Aunque ya ingresó a otra aerolínea, aún acumula deudas.

OTRO DE LOS AFECTADOS

Otro afectado por el cese de ambas aerolíneas fue Luis, ex supervisor de vuelo de Mexicana e Interjet.  

Cuando quebró Mexicana tuvo empleos temporales, pero en 2011 llegó a Interjet, la cual incumplió con el pago de su sueldo y se quedó con sus ahorros.

“Tuve que vender joyas y el coche que tengo lo puse a trabajar como taxi de aplicación”, mencionó.