- Tucson, Arizona
Albergues en la frontera de Estados Unidos y México se preparan para un eventual cruce masivo de migrantes tras el previsto fin del Título 42 de expulsión expedita de extranjeros el próximo 21 de diciembre y urgen al Gobierno estadounidense un trato digno para estos solicitantes de asilo.
“Anticipamos que tan pronto termine el Título 42 el número de migrantes que cruzan la frontera se incremente drásticamente. Esperamos recibir quizá de mil a dos mil migrantes por día”, dijo Norma Pimentel, directora ejecutiva de la filial de Caridades Católicas en el Valle del Río Grande (Texas).
La religiosa, quien por años ha estado al frente de la operación del mayor albergue para migrantes en Texas, asegura que actualmente hay miles de personas del lado mexicano que han esperado meses, e incluso años, para tener la oportunidad de cruzar la frontera y solicitar asilo.
Indicó que en estos momentos el albergue, que se encuentra en la ciudad de McAllen, recibe un promedio de 300 migrantes diariamente.
El 21 de diciembre se cumple el plazo que la corte dio al Gobierno de Joe Biden para prepararse para suspender el Título 42 al considerarlo “arbitrario” y “caprichoso”.
La polémica regla, implementada en 2020 por el expresidente Donald Trump (2017-2021) con la excusa de la pandemia, ha permitido la expulsión de más de 2,5 millones de migrantes desde marzo de 2020, según datos de la organización International Rescue Committee. La norma permite a la Patrulla Fronteriza deportar de inmediato a los migrantes que cruzan la frontera de manera irregular, sin permitirles presentar sus casos de asilo.
Activistas y grupos que defienden a los migrantes han luchado por terminar con el Título 42, que se ha mantenido en vigor bajo la Administración Biden.
“Sólo esperemos que el país esté preparado para ofrecer un proceso correcto, humano; que se les dé a los migrantes la oportunidad de presentar sus casos y no nada más los deporten”, dijo Pimentel.
En preparación para lo que podría ser un nuevo cruce masivo de migrantes, albergues en Texas y Arizona se encuentran listos para activar una red de ayuda que incluye iglesias y organizaciones locales dentro de sus comunidades.
“Nos estamos preparando para tener ya estos contactos listos y poder responder de manera inmediata a las necesidades”, explicó Pimentel.
Lo mismo ocurre en el albergue Casa Alitas en Tucson (Arizona), que recibe actualmente un promedio diario de 350 migrantes proveniente de otras ciudades fronterizas como Yuma (Arizona) y El Paso (Texas).
“Una vez que termine el Título 42 esperamos un significativo incremento en el número de migrantes que recibiremos. Esperamos un incremento de hasta mil migrantes por día”, dijo a EFE Teresa Cavendish, directora ejecutiva de Servicios Comunitarios Católicos del Sur de Arizona, quien representa el albergue.
Precisó que actualmente están recibiendo migrantes de diferentes países como Perú, Brasil, Cuba, Rusia, Ucrania e India, además de los países del Triángulo Norte de Centroamérica (El Salvador, Honduras y Guatemala).
El albergue prevé que una vez que termine el Título 42 llegarán migrantes de otros países como Venezuela y México.
Por el momento, los albergues también buscan más voluntarios que puedan cooperar en caso de que se registren nuevamente cruces masivos como los de 2019, con hasta 6.000 ingresos diarios a lo largo de la frontera.
Funcionarios del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) dijeron a la cadena CNN que de 9.000 a 14.000 migrantes podrían intentar cruzar la frontera sur diariamente una vez que termine el polémico Título 42.
Por su parte, organizaciones nacionales también se preparan para dar la bienvenida a los migrantes y luchar contra las posibles restricciones que dificulten el proceso de asilo.
“Con la terminación del Título 42, la presente Administración tiene la oportunidad de cumplir con los compromisos asumidos por el presidente Biden”, dijo Eleanor Acer, directora de Protección a Refugiados de la organización Derechos Humanos Primero.
Llegan más migrantes a FiladelfiaOtro autobús repleto de migrantes arribó a la estación de 30th Street Station en Filadelfia la mañana del lunes.
Hasta el momento se desconoce cuántas personas, entre las que figuran familias completas, provenían de Texas, pero fueron transportados al refugio al noreste de la ciudad para ser procesados y alcanzar su destino final.
Se pudo captar el momento en el que los migrantes se desmontaron del autobús que los trabajo a la zona y abordaron otro de SEPTA para su siguiente parada. Están supuestos a recibir ropa y comida cálida, así como orientación y asistencia médica.
“Ya pasamos las 200 personas desplazadas de Texas a Filadelfia. Al principio cuando llegan siempre hay un poquito de caos porque llegan con temor, pero una vez están acá y ven caras contentas que les proveen un cambio de ropa y un desayuno caliente para que conecten con su destino final todo cambia”, destacó Emilio Buitrago, co-fundador de Casa de Venezuela, una de las organizaciones sin fines de lucro que donan su tiempo en la gesta de asistencia a los migrantes.
Según Buitrago los allegados arriban “sin ningún conocimiento” de lo que les depara el destino.