Encuentran 500 muertes en internados de nativos

La oscura historia de esos sitios donde los niños fueron forzados a separarse de sus familias, se les prohibió hablar sus idiomas antiguos americanos y se les maltrató


En varios sitios se realizaron rituales y se colocaron objetos infantiles en memoria de esos niños.

 

LEGADO PROBLEMÁTICO

Haaland anunció una iniciativa en junio pasado para investigar el legado problemático de los internados y descubrir la verdad sobre el papel del gobierno en ellos. Las 408 escuelas que su agencia identificó operaban en 37 estados o territorios, muchos de ellos en Oklahoma, Arizona y Nuevo México.

El Departamento del Interior reconoció que la cantidad de escuelas identificadas podría cambiar a medida que se recopilan más datos. La pandemia de coronavirus y las restricciones presupuestarias obstaculizaron parte de la investigación durante el último año, dijo Bryan Newland, subsecretario de Asuntos Indígenas del Departamento del Interior.

El gobierno dirigía directamente algunos de los internados. Iglesias católicas, protestantes y de otro tipo operaban otras con fondos federales, respaldadas por las leyes y políticas estadounidenses para “civilizar” a los nativos americanos.

El informe del Departamento del Interior fue motivado por el descubrimiento de cientos de tumbas sin marcar en los antiguos sitios de escuelas residenciales en Canadá que trajeron recuerdos dolorosos para las comunidades indígenas.

Haaland también anunció el miércoles una gira de un año para los funcionarios del Departamento del Interior que permitirá a los exalumnos de los internados de las tribus nativas americanas, las aldeas nativas de Alaska y las comunidades nativas de Hawái compartir sus historias como parte de una colección permanente de historia oral.

“Es mi prioridad no solo dar voz a los sobrevivientes y descendientes de las políticas federales de internados indígenas, sino también abordar los legados duraderos de estas políticas para que los Pueblos Indígenas puedan seguir creciendo y sanando”, dijo.

Las condiciones de los internados variaron en los EE. UU. y Canadá. Si bien algunos ex alumnos informaron experiencias positivas, los niños en las escuelas a menudo fueron sometidos a disciplina de estilo militar y se les cortó el pelo largo.

 

HABILIDADES PROFESIONALES

Los primeros planes de estudios se centraban en gran medida en habilidades profesionales obsoletas, incluidas las tareas domésticas para las niñas.

Los líderes tribales han presionado a la agencia para que se asegure de que los restos de los niños que se encuentren sean debidamente atendidos y devueltos a sus tribus, si así lo desean. Las ubicaciones de los sitios de entierro no se darán a conocer públicamente para evitar que se alteren, dijo Newland.

Dar cuenta del paradero de los niños que fallecieron ha sido difícil porque no siempre se mantuvieron registros. El radar de penetración terrestre se ha utilizado en algunos lugares para buscar restos.

La National Native American Boarding School Healing Coalition, que creó un inventario inicial de las escuelas, ha dicho que el trabajo del Interior será un paso importante para que Estados Unidos tenga en cuenta su papel en las escuelas, pero señaló que la autoridad de la agencia es limitada.