EL PASO, TX.- Casi 120 integrantes de la Guardia Nacional de Nuevo México, pertenecientes a la Compañía de Policía Militar 126, partieron hacia Texas para una misión de un año en apoyo a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP).
Los efectivos servirán bajo el Título 10 de servicio activo federal como parte de la Fuerza de Tarea Conjunta–Frontera Sur (JTF-SB, por sus siglas en inglés), en una rotación rutinaria para reemplazar a otras unidades que actualmente operan a lo largo de la frontera sur.
Antes de su despliegue, la unidad realizó su entrenamiento anual centrado en operaciones de convoy, patrullajes vehiculares y a pie, así como navegación terrestre tanto diurna como nocturna.
Familiares y miembros de la comunidad se reunieron en la escuela preparatoria Mayfield, en Las Cruces, para despedir a los soldados durante una ceremonia del programa Yellow Ribbon, que brinda apoyo y recursos a las familias antes, durante y después del despliegue.
“Para muchos de ustedes, esta no es su primera misión, y agradecemos que una vez más hayan respondido al llamado de la nación”, expresó el general de brigada Nathaniel Carper, subjefe adjunto de la Guardia Nacional de Nuevo México. “El enemigo busca sabotear nuestro país. Drogas están entrando y tratan de destruirnos. La frontera sur no es solo una línea en el mapa; es la puerta de entrada a nuestra nación. Les pedimos que protejan esa puerta y salvaguarden nuestro modo de vida”.
El capitán Marcos Myers, comandante de la Compañía de Policía Militar 126, encabezará la misión. “Somos soldados ciudadanos, provenientes de las comunidades de Nuevo México donde crecimos”, dijo Myers. “La frontera sur es una línea de defensa crítica para el país. Las organizaciones criminales transnacionales se lucran del sufrimiento humano, traficando drogas, armas y personas. No permitiremos que eso ocurra”.