Se declara inocente de mentir al Congreso

Los abogados de Comey cuestionan las motivaciones políticas detrás de la acusación en su contra.

El exdirector del FBI, James Comey, se declaró inocente el miércoles en un caso penal que ha puesto de relieve los esfuerzos del Departamento de Justicia contra adversarios del presidente estadounidense Donald Trump. Los abogados de Comey planean argumentar que la acusación tiene motivaciones políticas y debería ser desestimada.

La lectura de cargos duró menos de media hora, pero el momento estuvo cargado de un significado histórico, dado que el caso ha amplificado las preocupaciones de que el Departamento de Justicia está siendo usado como un arma para perseguir a los enemigos políticos de Trump y opera a instancias de una Casa Blanca decidida a buscar represalias.

La declaración de inocencia de Comey ante las acusaciones de que mintió al Congreso hace cinco años inicia un proceso de disputas legales que podría culminar, dentro de algunos meses, en un juicio ante el tribunal federal de Alexandria, Virginia, justo a las afueras de Washington. Los abogados defensores dijeron que tienen la intención de pedir que se desestime el caso antes del juicio, argumentando que constituye una persecución vengativa, y planean impugnar la legitimidad del nombramiento de la fiscal que presentó los cargos pocos días después de que Trump la nombrara apresuradamente para su puesto.

“Es el honor de mi vida representar al señor Comey en este asunto”, dijo el miércoles en el tribunal Patrick Fitzgerald, uno de sus abogados y amigo de mucho tiempo que sirvió con él en el Departamento de Justicia del presidente George W. Bush.

La acusación, presentada hace dos semanas, siguió a una cadena de eventos extraordinarios en los que Trump imploró públicamente a la secretaria de Justicia, Pam Bondi, que tomara medidas contra Comey y otras personas a las que percibe como sus adversarios. El mandatario también reemplazó al veterano abogado que había supervisado la investigación con Lindsey Halligan, una asistente de la Casa Blanca que nunca ha sido fiscal federal, pero fue una de sus abogadas personales.

Halligan se apresuró a presentar cargos antes de que venciera el plazo legal, a pesar de que otros abogados de la oficina advirtieron que las pruebas eran insuficientes para una acusación. Ella se sentó en la mesa de la fiscalía, pero no se dirigió al juez.

En una señal de la naturaleza inusual del caso, los dos fiscales que se han encargado de manejarlo residen en Carolina del Norte, en lugar del prestigioso Distrito Este de Virginia, que Halligan ahora lidera.

Qué dice la acusación

En la acusación de dos cargos se alega que Comey hizo una declaración falsa al Comité Judicial del Senado el 30 de septiembre de 2020, cuando se le preguntó si había autorizado a algún asociado para que sirviera como fuente anónima ante los medios de comunicación en relación con investigaciones de Trump o la candidata presidencial demócrata de 2016, Hillary Clinton.

Comey ha negado cualquier irregularidad y ha dicho que espera con interés un juicio, que el juez fijó para el 5 de enero, aunque esa fecha estará sujeta a cambios.