Cuando un brote de sarampión afectó el oeste de Texas a principios de este año, el absentismo escolar aumentó a niveles mucho más allá del número de niños que probablemente se enfermaron, según un estudio, ya que los estudiantes fueron excluidos o sus familias los mantuvieron en casa para minimizar el contagio de la enfermedad.
Las ausencias en el Distrito Escolar Independiente de Seminole, que atendía a estudiantes en el corazón del brote, aumentaron un 41% en todos los niveles de grado en comparación con el mismo período de los dos años anteriores, según el estudio de la Universidad de Stanford.
Impacto en la comunidad educativa de SeminoleEl estudio preliminar, que no ha sido publicado ni sometido a una revisión formal por pares, ofrece un vistazo al impacto en el aprendizaje de los estudiantes por el brote de sarampión, una enfermedad muy contagiosa que ha resurgido en comunidades de Estados Unidos con bajas tasas de vacunación. En Texas y a nivel nacional, alrededor de dos tercios de los casos de sarampión han sido entre niños no vacunados. Cuando el sarampión se propaga, los funcionarios de salud pública responden excluyendo a los estudiantes no vacunados de las escuelas.
"Los costos de ese absentismo no son sólo entre los niños enfermos, sino entre todos los niños que son mantenidos fuera de la escuela como precaución", explicó Thomas Dee, economista y profesor de educación de Stanford que coescribió el estudio.
Cifras alarmantes de vacunación en TexasEl sarampión se transmite por el aire y representa un riesgo grave para los niños pequeños. En el año 2000, la enfermedad fue declarada erradicada en Estados Unidos gracias al uso generalizado de la vacuna contra el sarampión, las paperas y la rubeola. En los últimos años, más padres han solicitado exenciones a los requisitos escolares para las vacunas, y la mayoría de los estados están por debajo del 95% de la tasa de vacunación en jardín de infantes que los expertos consideran necesaria para prevenir brotes.
En el Distrito Escolar Independiente de Seminole, apenas el 77% de los niños de jardín de infantes estaban vacunados contra el sarampión en el curso escolar 2024-2025, según datos del departamento de salud estatal. El pico de sarampión allí desencadenó el peor año de sarampión en Estados Unidos en más de tres décadas, con 762 personas enfermas en todo Texas en siete meses.
Ese número podría haber sido aún mayor, ya que el Departamento de Servicios de Salud del Estado de Texas dice que hubo 182 casos potenciales adicionales de sarampión reportados en marzo de 2025 entre niños en el condado de Gaines, que el estado excluyó de su conteo debido a la falta de información.
Recomendaciones de salud ante el brote de sarampiónEl absentismo superó con mucho los casos confirmados de sarampión. El estudio estimó, basado en datos estatales, que 141 estudiantes del distrito de Seminole tenían casos confirmados de sarampión. Encontró que el aumento en las ausencias escolares fue aproximadamente diez veces lo que se esperaría solo de esos estudiantes.
Las autoridades de salud estatales recomiendan que las personas enfermas de sarampión o con sospecha de sarampión se aíslen en casa hasta cuatro días después de que aparezca el característico sarpullido. La guía estatal indica que los estudiantes no vacunados o de otro modo vulnerables deben ser excluidos de la escuela hasta por 21 días después de la exposición al sarampión.