Revoca McAllen permisos de uso especial a bares

El alcalde Javier Villalobos afirma que se cerrarán los negocios que no cumplan con las normas de seguridad

McALLEN, Texas.- La ciudad de McAllen ha revocado los permisos de uso especial a docenas de bares en el centro por no cumplir con el código de la ciudad, específicamente por no implementar medidas de seguridad para prevenir el consumo de alcohol por menores de edad. 

El alcalde Javier Villalobos afirmó que la ciudad prioriza la seguridad pública sobre las ganancias y que se cerrarán los negocios que no cumplan con las normas.

Medidas de seguridad implementadas:

Tecnología de verificación de edad

Marcadores UV para identificar claramente a los menores de 21 años

Consecuencias para los negocios:

Revocación de permisos de uso especial

Multas por más de $11,000 por operar sin permiso o violar sus términos

Citaciones por violaciones al código de incendios y operar sin permisos

Impacto en la comunidad


La ciudad busca reducir el consumo de alcohol por menores de edad y promover la seguridad pública. Los negocios afectados pueden apelar la decisión y demostrar que cumplen con las normas mínimas de seguridad.

A pesar de los desafíos en la seguridad, McAllen ha alcanzado cifras récord en desarrollo económico e industrial durante el 2024, gracias en parte a su conectividad con México. La ciudad cuenta con seis parques industriales y ha visto un incremento en el producto interno bruto y en las importaciones que llegan a los Estados Unidos a través del RGV.

El alcalde dice que seguirá examinando los negocios del centro y que es necesario celebrar más reuniones sobre el problema del consumo de alcohol por parte de menores de edad.

Así mismo, el propietario de La Vaperia, Christopher Drewry, dijo que el negocio ha estado lento hasta ahora.

Esperaba que al estar a una cuadra de la escena de bares de la calle 17, más personas entrarían por la puerta de su tienda de vapeo.

La Vaperia tiene sucursales en Tampico y Monterrey, y esperaban tener éxito en el centro de McAllen, pero ahora planean cerrar sus puertas definitivamente. Drewry dice que varios incidentes en la tienda y el bajo tráfico peatonal están contribuyendo a su decisión.

Cuando la tienda abría hasta tarde, cuenta que la gente entraba pidiendo usar el baño para vomitar. Ha tenido que lidiar con el olor a orina afuera y las botellas tiradas en la acera.