Aún cuando el acaparamiento de banquetas es una costumbre que, a pesar de ser una falta al reglamento de tránsito, persiste, pues esta práctica ya se ve como familiar.
En ocasiones es más perjudicial para peatones y personas con discapacidad que no pueden disponer de la seguridad que brinda transitar sobre las aceras.
Aunque también hay zonas donde las causas son la vegetación o materiales de construcción, la obstrucción de banquetas causada por vehículos estacionados es uno de los problemas más comunes.
Esta situación, que afecta especialmente a los peatones, sobre todo en días de lluvia como los recientes, también es propiciada por infraestructura invasiva y construcciones en proceso.
En recorridos por áreas afectadas se pudo observar que autos se estacionan sobre las banquetas e impiden el paso seguro y accesible a los peatones, lo que puede ser particularmente peligroso en condiciones de lluvia y encharcamientos.
Ante esa situación, los peatones son obligados a caminar por la vía vehicular, lo que aumenta el riesgo de accidentes con automóviles o incluso de sufrir caídas por el pavimento lodoso.
Sin duda, esa dificultad para utilizar las aceras es mayor para personas con discapacidad motora, es decir, quienes utilizan silla de ruedas, a quienes los obstáculos les impiden circular de forma segura.