Continuamente cerradas y en malas condiciones se encuentran lo que son las instalaciones de las oficinas del otrora poderoso Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Ubicadas en predio del fraccionamiento Río Bravo, en la zona centro de la ciudad, en el que figura como presidente el profesor Miguel Lambrada, están requiriendo de personal, mantenimiento y el pago de adeudos por concepto de servicios básicos, principalmente del agua.
El PRI, que se distinguió en los años de poder como el único partido que cuenta con oficinas propias, cuyos artífices del edificio lo han abandonado, como el empresario Zacarías Melhem, se encuentra tristemente en plena decadencia.