En la escuela secundaria general número 1 Alfredo del Mazo aclaran que efectivamente se dio la discusión verbal y física entre el padre adoptivo de uno de los estudiantes y el prefecto, pero que los hechos fueron al revés.
Entrevistado el director, profesor Marco Antonio Valero García, detalló que de inicio se le explicó al señor Adolfo el porqué se le pidió que entregara el celular y a la salida se le regresaría ya que en clases estaba haciendo uso del mismo lo cual está restringido por acuerdo del consejo técnico, por qué es un destructor del aprendizaje durante el horario en que se imparten las materias.
También sobre el encendedor que portaba, y parecía que entendió, pero resulta que como estaba casi en la salida de la escuela se regresó, y fue quien lo empujó al prefecto Alberto de León mismo que cayó al suelo.
“Se molestó por qué hay disciplina en el plantel y reglas que se tienen que respetar, de los hechos se levantó un acta sobre lo ocurrido, y testigos que avalan como sucedieron”.
Recordó que, en cuanto hace al celular los alumnos saben que lo deben apagar durante la jornada como una opción, como segunda pueden utilizar el teléfono de la escuela, que el maestro les facilite el auricular en caso de una emergencia, o que adquieran un teléfono análogo.