Luego del reciente asesinato de una persona de la comunidad LGBT en Matamoros, el activista Francisco de la Rosa, presidente del colectivo local “Matamoros se viste de Arcoiris”, alzó la voz para exigir justicia ante la creciente ola de crímenes que, asegura, han quedado impunes en la ciudad.
En entrevista, De la Rosa lamentó que el caso más reciente, ocurrido el pasado lunes, se suma a una larga lista de hechos violentos contra personas de la diversidad sexual que no han sido esclarecidos.
“Que yo tenga memoria, sólo un caso ha sido resuelto, y aún así la persona detenida terminó saliendo libre. De ahí en fuera, ninguno de estos crímenes se ha esclarecido. Ya son bastantes, no tengo la cifra exacta, pero sí ha sido un número considerable”, expresó.
El activista rechazó las versiones oficiales que, en algunos casos, han tratado de minimizar estos asesinatos como “crímenes pasionales” entre parejas, subrayando que la forma en la que son cometidos demuestra un alto grado de violencia e intencionalidad.
“No es el caso. No podemos llamarlo pasional cuando ves el odio, el coraje con el que actúan. Son crímenes con dolo, con saña. Eso no se puede ignorar”, dijo De la Rosa.
En el marco del Mes del Orgullo LGBT, De la Rosa también denunció que la comunidad continúa enfrentando altos niveles de discriminación social y violencia simbólica en redes sociales, donde, señaló, muchos comentarios denigrantes reflejan el odio que aún persiste.
“Si ustedes ven los comentarios en las transmisiones de noticias, hay demasiada gente opinando con odio, simplemente por nuestra preferencia. Es como si alguien fuera juzgado por ser aficionado a un equipo de futbol”, comparó.
Con respecto a la víctima más reciente, indicó que aunque él suele ser respetuoso de no etiquetar a las personas fallecidas, los medios de comunicación “sacaron del clóset” a la persona, al identificarla públicamente como miembro de la comunidad LGBT.
“Para mí es una persona que fue asesinada, punto. No se necesita una etiqueta para exigir justicia”, señaló.
Finalmente, hizo un llamado firme a las autoridades de todos los niveles para que actúen con responsabilidad y profesionalismo ante estos crímenes, no sólo en casos relacionados con la diversidad sexual, sino también con mujeres, hombres y cualquier víctima de violencia.
“Pedimos que se pongan las pilas, que hagan su trabajo. No pedimos trato especial, pedimos igualdad. No somos diferentes, no somos discapacitados, queremos el mismo respeto que cualquier otra persona”, concluyó.