A pesar de la creciente registrada en el río Bravo debido a los escurrimientos provenientes del lado estadounidense, no existe ninguna alerta de riesgo para Matamoros, aseguró Marco Antonio Hernández Acosta, gerente general de la Junta de Aguas y Drenaje (JAD).
El funcionario explicó que los escurrimientos actuales están siendo analizados y monitoreados por las autoridades hídricas, y se estima que representarán un beneficio importante para el sistema de presas, en particular para la Falcón, que actualmente se encuentra en niveles bajos.
“Son escurrimientos importantes que vienen desde Estados Unidos. Aunque hay una creciente en algunos puntos, en el caso de Matamoros no hay motivo de preocupación: el agua va a llegar a la presa Falcón, y eso es positivo para nosotros”, indicó Hernández Acosta.