Lecturas para después de la batalla

Libros permiten conocer un periodo del que el mundo actual es un heredero directo

La Segunda Guerra Mundial fue un acontecimiento tan salvaje, tan horroroso, que a veces parece que convirtió en positivo todo lo que vino detrás. Sin embargo, la Europa posterior a 1945 fue, como la definió Keith Lowe, un “continente salvaje” y, sobre todo, un continente dividido. Los países ganadores del conflicto no solo se libraron del yugo nazi, salvo el Reino Unido que no llegó a ser invadido, sino que vivieron un periodo de prosperidad material sin precedentes y lanzaron el proyecto que definiría el continente, la unidad europea. Aquellos Estados que quedaron bajo la influencia soviética, más allá del Telón de Acero, quedaron sometidos a dictaduras comunistas hasta finales del siglo XX. España y Portugal, por su parte, quedaron varadas en dictaduras fascistas que lograron sobrevivir gracias al temor al comunismo y al apoyo de Estados Unidos.

Aquí van cinco libros que pueden permitir conocer un periodo del que somos herederos directos.

Postguerra. Una historia de Europa desde 1945, de Tony Judt



Descenso a los infiernos. 1914-1949 y Ascenso y crisis. 1950-2017, de Ian Kershaw?El británico Ian Kershaw (1943), un gran especialista en el nazismo y autor de la más conocida biografía de Hitler, trató de repetir la hazaña de Judt, aunque en dos tomos. Es interesante que el primero, que cubre las dos guerras mundiales, llegue hasta 1949, lo que demuestra la violencia de la primera posguerra europea. El segundo alcanza hasta la crisis económica de 2008, la recuperación y la crisis de los refugiados. Es especialmente interesante el capítulo dedicado al renacimiento cultural europeo tras la catástrofe de la Segunda Guerra Mundial.



Continente salvaje. Europa después de la Segunda Guerra Mundial, de Keith Lowe?La Europa de la paz fue tremendamente violenta. Esta es la tesis sobre la que el historiador británico Keith Lowe (1970) construye este libro que obliga a cambiar la forma en la que se miran los años inmediatamente posteriores al fin del conflicto. Fue una era de guerras civiles (Grecia, Yugoslavia), de limpieza étnica (con la expulsión de los alemanes étnicos de los países en los que habían vivido sus familias desde hace siglos), de dictaduras. Los pocos judíos supervivientes del Holocausto fueron perseguidos en el Este de Europa: con la posguerra no acabaron los pogromos. Hasta la creación del Estado de Israel siguieron sin un lugar seguro en el que vivir. Este libro de Lowe permite mirar a la posguerra de una forma completamente diferente.