La belleza como un arma

El artista irlandés Richard Morse dirige una mirada crítica a algunos de los asuntos que definen nuestro tiempo, como la migración y el cambio climático

Tristes Tropiques es el título de la última serie de Richard Mosse (Kilkenny, Irlanda, 41 años). Está compuesta por imágenes de gran formato, que destacan por un cromatismo muy singular. 

Colores vivos y estridentes se acompañan de otros que encierran una siniestra melancolía. Componen una paleta que nos habla de la belleza y también de la tragedia. Fueron realizadas durante la catastrófica ola de incendios que asoló la selva tropical brasileña durante 2020 y que tuvo como resultado la pérdida de grandes extensiones, ecosistemas únicos y de gran diversidad. Así, al acercarse a Burnt Pantanal II, el espectador puede apreciar que las llamativas manchas de color carmín pertenecen al follaje que quedó vivo, las amarillas a la parte del bosque que murió, mientras los rastros de los troncos que quedaron calcinados salpican el conjunto con el color más pálido de la ceniza. Mosse describe las imágenes como “mapas vivientes”. Expresan la fragilidad de la materia orgánica dominada por la violencia depredadora del hombre.

El autor se define como “un artista que se sitúa entre el arte contemporáneo y el reportaje”. Así, a lo largo de su trayectoria, su mirada se ha posado en temas que definen nuestro tiempo, como la migración, el conflicto y en esta última etapa el cambio climático, cuya representación ha supuesto un gran reto para él. “Algo que puede llegar a ser muy dificultoso debido a las limitaciones de la percepción humana y que verdaderamente nos supera a la hora de describirlo y representarlo”, tal y como expresaba en un vídeo grabado en la presentación de la serie en abril, en la Jack Shainman Gallery de Nueva York. Los condicionamientos que conlleva la fotografía documental y sus límites han fascinado siempre a este fotógrafo, que por otra parte nunca ha dejado de creer en el poder de la imagen. De ahí que su objetivo se ha centrado en ensanchar los límites del género, adaptándose a los diferentes contextos que surgían con cada nuevo proyecto, a través del uso de distintas cámaras y del planteamiento de nuevos enfoques.

Tristes Tropiques está compuesto de imágenes multiespectrales, realizadas a través de drones, que captan detalladamente el retroceso de la selva amazónica, mediante información adicional que el ojo humano no logra alcanzar. Comparte título con la que quizás sea la obra más conocida de Claude Lévi-Strauss, en la cual, ya en 1954 alertaba de la deriva medioambiental del planeta. “Lo que nos mostráis en primer lugar, oh viajes, es nuestra inmundicia arrojada al rostro de la humanidad”, escribía el filósofo y antropólogo.