Parte importante para que las telesecundarias pudieran cumplir con su misión fue que en 1986, Serafín Gómez entonces joven empresario local, donara cuatro antenas parabólicas.
Sin parabólicas no habrían prosperado
Parte importante para que las telesecundarias pudieran cumplir con su misión fue que en 1986, Serafín Gómez entonces joven empresario local, donara cuatro antenas parabólicas.