Río Bravo, Tam.- Tal y como lo anticipó la Comisión Federal de Electricidad (CFE), esta sábado se dio la tan polémica suspensión del servicio que inició desde las 06:00 horas y que desde temprana hora afectó algunos sectores, pero no impidió que algunos giros comerciales y de prestación de servicios, pudieran operar.
Los establecimientos mejor preparados, desde su apertura contaron con generadores de electricidad, ya fuera a diésel o a gasolina, para poder atender a su clientela, pero no hubo necesidad, pues en las zonas comerciales, no se cortó el suministro eléctrico.
En el caso de servicios públicos como Comapa, empresa paraestatal que suministra agua potable y ofrece el servicio de drenaje sanitario, también esta tuvo disponible un generador, este a diésel para echar a andar los motores de las plantas de extracción y la potabilizadora, en caso de ser necesario.
Lo que representaba mayor riesgo, era los semáforos, que estos quedaran fuera de servicio, lo que finalmente no ocurrió.
Las tiendas departamentales, supermercados y establecimientos de cadenas nacionales, no enfrentaron gran desafío, pero sí los micro y pequeños negocios en colonias y fraccionamientos, sobre todo talleres que dependen de la electricidad para ofrecer sus servicios, tales como vulcanizadores, eléctricos o de reparación electrónica.
Fue en los hogares, los realmente afectados, sobre todo amas de casa que utilizan el fin de semana para quehaceres del hogar y jóvenes estudiantes que utilizan el fin de semana para estudiar, hacer tareas, quienes tuvieron que esperar hasta pasadas las 14:00 horas.
Las colonias y fraccionamientos afectados fueron:
-Brisas del Campo
-Hacienda Las Brisas
-Hijos de Ejidatarios
-Integración Familiar
-Praderas del Sol
-Rivieras del Bravo
-Sauteña
Oficialmente la CFE argumentó labores de mantenimiento a nivel regional, pues el apagón también se extendió a la zona de Reynosa.