Se declara en quiebra Thomas Cook

Gobierno británico contrata aviones chárter para llevar de regreso a miles de clientes del proveedor de viajes británico de 178 años de edad

Thomas Cook Group Plc ha colapsado bajo el peso de la deuda tras el fracaso de las conversaciones con acreedores, lo que ha obligado al Gobierno británico a contratar aviones chárter para llevar de regreso a miles de clientes del proveedor de viajes británico de 178 años de edad.

La compañía se declaró en quiebra este lunes temprano después de que las negociaciones de última hora para captar fondos adicionales no resultaran en un acuerdo.

La medida provocó la cancelación de todas las reservas, vuelos y vacaciones con Thomas Cook, lo que generó pánico en internet entre los viajeros. En lo que llamó "la mayor repatriación en la historia de tiempos de paz", el Gobierno dijo que trabajaría para llevar de regreso al Reino Unido a los clientes de la operadora en las próximas dos semanas sin costo alguno.

El colapso supone la desaparición de la que es una de las marcas más conocidas del Reino Unido, y corona meses de conversaciones con los inversionistas de Thomas Cook, lideradas por Fosun Tourism Group. La firma china, propietaria de la cadena de complejos hoteleros Club Med, propuso un rescate de mil 100 millones de dólares a cambio del control de las operaciones turísticas de Thomas Cook y una participación minoritaria en su aerolínea.

La semana pasada, la compañía con sede en Londres dijo que necesitaba 200 millones de libras (250 millones de dólares) más, lo que evaporó rápidamente las expectativas de un rescate.

"Aunque se había llegado a un acuerdo en gran medida, una demanda adicional de fondos solicitada en los últimos días de negociaciones presentó un desafío que finalmente resultó insuperable", dijo el máximo ejecutivo, Peter Fankhauser.

La compañía es una de las víctimas de más alto perfil de la transformación del negocio de viajes hacia internet de las últimas décadas y el deterioro del mercado de vacaciones europeo. Durante decenios, los operadores turísticos como Thomas Cook o la alemana TUI AG prosperaron ofreciendo paquetes de vacaciones a europeos en busca de sol. Pero el auge de las aerolíneas de descuento y el negocio por internet han restado ganancias a un sector que es altamente estacional y propenso al impacto de atentados terroristas y la agitación política.

Unos 150 mil ciudadanos británicos se han quedado desplazados en el extranjero, mientras que otros 350 mil ciudadanos extranjeros también están en otros países con paquetes de vacaciones de Thomas Cook, según ha informado el Financial Times.

El Gobierno británico aconsejó a los turistas que viajaban con paquetes y vuelos de Thomas Cook que no acortaran sus estancias. El regulador de aviación civil planea repatriar a los clientes lo más cerca posible de la fecha de regreso reservada. El Gobierno también cubrirá el costo del alojamiento para los clientes de Thomas Cook.

El colapso supone otro golpe al sector turístico europeo, pocos meses después de la quiebra de la aerolínea islandesa de bajo costo Wow Air. La firma cesó sus operaciones en marzo debido a la falta de financiamiento, dejando a 2 mil 700 pasajeros desplazados y perjudicando la economía del país.

Thomas Cook se declaró en bancarrota este lunes temprano ante el Tribunal Superior de Londres. AlixPartners LLP fue nombrado asesor y trabajará con la autoridad de aviación para transportar a los clientes de regreso al Reino Unido.

Fosun Tourism Group dijo en un comunicado el lunes que le decepcionaba que Thomas Cook no hubiese encontrado una solución.

"Fosun confirma que su posición se mantuvo sin cambios durante todo el proceso, pero lamentablemente otros factores han cambiado", dijo la compañía. "Hacemos llegar nuestro pesar más profundo a todos los afectados".

Las acciones de Fosun Tourism Group llegaron a caer un 5.5 por ciento en Hong Kong antes de reducir las pérdidas. El título bajó a 4.7 por ciento.

La oferta de rescate más reciente proponía cambiar la deuda existente por acciones, con lo que Fosun se habría quedado con la mayoría del negocio de operaciones turísticas de Thomas Cook, mientras que los acreedores habrían controlado las aerolíneas. La compañía contaba con unos 38 mil empleados a fecha de 31 de marzo, según datos recabados por Bloomberg.