Río Bravo, Tam.- En la comunidad fronteriza de Nuevo Progreso uno de los principales problemas que continúan padeciendo y afrontando de manera cotidiana tanto el comercio en general como en las colonias, es el persistente desbasto de agua en la mayor parte del poblado, lo que ha obligado a algunos empresarios a adquirir pipas por cuenta propia.
Es el clamor generalizado cuya situación termino por colapsar y recrudecerse durante la canícula al aumentar la demanda en el servicio del preciado líquido, para lo cual la Junta del Administración Operación y Mantenimiento que dirige el químico Miguel Vázquez, no han tenido seriedad y congruencia entre lo que dicen y lo que hacen al persistir el problema.