CIUDAD DE MÉXICO
Alexis Ávila, la mujer de 18 años que arrojó a su bebé recién nacido a un contenedor de basura, en la ciudad de Hobbs, Nuevo México y que había sido acusada de intento de asesinato premeditado y abuso infantil, salió libre bajo fianza, después de confesar que no supo de su embarazo hasta una semana antes de parir, pues había ido al médico por un dolor abdominal.
Alexis fue arrestada y procesada en la cárcel el sábado por la noche, pero fue liberada poco después, tras pagar una fianza. El abogado que la representa dijo que lo sucedido es, de por sí, una tragedia para su familia y su comunidad.