Luego de la suspensión del año pasado por el coronavirus, la Escuela IDEA McAllen celebró su festival anual de otoño con un convivio donde niños y adultos se divirtieron por igual.
Las puertas de la escuela se abrieron para recibir a las familias que se dieron cita para celebrar la llegada del otoño y el tradicional Halloween por lo que los niños asistieron disfrazados de sus personajes favoritos, no sin antes ser revisados por la temperatura y portar mascarillas.
Las amenidades no podía faltar la repartición de dulces y golosinas, que por la situación de pandemia que estamos viviendo, se llevó a cabo en la modalidad de autoservicio.
En el estacionamiento las cajuelas de más de una docena de autos se abrieron para obsequiar dulces a los niños. El Departamento de bomberos de McAllen distribuyeron cascos de plástico y otros artículos relacionados con la prevención de incendios.
Los adultos, además de antojitos, experimentaron el pasillo del terror ya que una parte de la escuela se acondicionó como casa de espantos y desde donde los despavoridos gritos fueron clara muestra que el lugar logró el objetivo.
Los niños brincaron, rieron y se divirtieron en los juegos con sus amiguitos, que al final nadie quería dejar el lugar.
Josefina, madre de dos niños de la escuela, comentó que ya hacía falta que se realizaran de nueva cuenta los eventos presenciales en la escuela.
“Es que se fortalecen las relaciones con nosotros y con los maestros, podemos verlos en otra faceta”.
Cientos se reúnen para dar la bienvenida al otoño y celebrar Halloween.