Reflejan vacunas contra el Covid enorme desigualdad

Pocos se imaginaron que las naciones pobres quedarían a merced de donaciones de los ricos

Cuando comenzó la puja por las vacunas contra el coronavirus, las autoridades sanitarias sabían que sería una batalla dispareja entre ricos y pobres.

Pero pocos se imaginaron que las naciones pobres quedarían a merced de donaciones de los ricos o que la desigualdad sería tan grande y duraría tanto. Los países pobres han vacunado apenas el 1% de su población, comparado con el 55% en Estados Unidos y el 25% a nivel mundial.

Las razones por esta brecha responden a decisiones tomadas al comienzo, la financiación de las compras y la distribución de las vacunas. Funcionarios de gobiernos, sobre todo de Estados Unidos y Europa, dijeron a la Associated Press que nunca pensaron en la situación mundial, sino que se enfocaron en sus países.

Sorpresivamente, el Covid-19 golpeó a los países ricos primero, que tenían la capacidad y la tecnología para producir vacunas. 

FALLAN PLANES

Fallas en la planificación de la venta de vacunas a las naciones pobres hicieron que no pudiesen competir con los ricos cuando finalmente aparecieron las vacunas.

Y las naciones ricas expandieron la vacunación a gente cada vez más joven mientras los países pobres seguían esperando dosis para los más vulnerables.