Un par de carísimos productos milagro, los llamados detectores moleculares que el gobierno de Felipe Calderón compró a montones para combatir al narco, resultaron ser un fraude, juguetes de plástico. Contra las advertencias del gobierno británico, la experiencia del FBI estadounidense y los argumentos de la comunidad científica mexicana, el Ejecutivo y los jefes militares siguen arriesgando la seguridad del país, de su personal y del resto de los ciudadanos al usarlos para detectar bombas o drogas y justificar cateos.
Productos milagro de Calderón
Un par de carísimos productos milagro, los llamados detectores moleculares que el gobierno de Felipe Calderón compró a montones para combatir al narco, resultaron ser un fraude, juguetes de plástico. Contra las advertencias del gobierno británico, la experiencia del FBI estadounidense y los argumentos de la comunidad científica mexicana, el Ejecutivo y los jefes militares siguen arriesgando la seguridad del país, de su personal y del resto de los ciudadanos al usarlos para detectar bombas o drogas y justificar cateos.