Se desconoce hacia qué ciudad norteña se dirigirán pero pudiera llegar una parte a Reynosa.
Aquí en la plaza se piensa que fácilmente hay más de 3,000 personas entre mujeres, hombres y niños de diferentes nacionalidades, dijo un hombre de origen hondureño, pues todos los días llegan entre 50 o más amén de los que son repatriados de Estados Unidos y que buscan una nueva oportunidad de llegar a ese país porque allá se quedó parte de su familia.
Cada vez caben menos personas en la plaza, donde casi la totalidad de las banquetas ya están ocupadas.
Ya no se anota a quienes arriban al campamento, labor que venía realizando Belén Dubont Morales, proveniente de Guatemala y quien también está en espera de que se reanude el programa de asilo político en el vecino país del norte.
Belén Dubont, según comentaron algunos de los asentados en el área verde situada a pocos metros del puente internacional Reynosa-Hidalgo, ha estado un poco enferma últimamente y esperan que pronto se mejore su salud para continuar con su labor, pues se le considera como una de las coordinadoras de la congregación de migrantes de mencionado sitio.