El exalcalde Armando López Flores, junto con quienes fueran su tesorera, contralor y secretario de Obras Públicas pudieran recibir fuerte sanción a través de la Contraloría Estatal y Congreso del Estado, toda vez que en todo momento han estado entorpeciendo la entrega-recepción, pues no se entregan cuentas claras.
Podrían sancionar a exalcalde y su gabinete
El exalcalde Armando López Flores, junto con quienes fueran su tesorera, contralor y secretario de Obras Públicas pudieran recibir fuerte sanción a través de la Contraloría Estatal y Congreso del Estado, toda vez que en todo momento han estado entorpeciendo la entrega-recepción, pues no se entregan cuentas claras.
Altamira, Tam.El contralor municipal, Francisco Javier Ortiz Carreón, señaló que estos funcionarios no cumplieron con la entrega del informe detallado que se les solicitó y la documentación con la que cuentan, es insuficiente y las cuentas no se detallan.Señaló que el pasado viernes fue el último día que tuvieron los exfuncionarios para entregar el informe a detalle de sus áreas, incluyendo al exalcalde Armando López Flores.Se requirió entre varias de las observaciones que se tienen, el detalle de adelantos pagados a compañías que dejaron inconclusas o de mala calidad 14 obras que oscilan en los 20 millones de pesos.Señaló que todas las irregularidades que encontraron las harán llegar a la Contraloría Estatal, pues será esta instancia quien requiera de la presencia de los exfuncionarios y aclaren las inconsistencias.Indicó que el municipio tiene hasta el próximo martes para entregar la documentación que lograron encontrar con respecto a la entrega-recepción.Refirió que el Congreso del Estado y la Contraloría del Estado son quienes deberán actuar en contra de los exfuncionarios en caso de que se encuentren inconsistencias y que éstas no sean aclaradas, pudieran parar hasta en la cárcel.Cabe destacar que en cuanto a la extesorera, pese a que entregó la documentación requerida en tiempo y forma, aún se analiza si ésta tiene inconsistencias, pues existen dudas en los sueldos que devengaban los funcionarios, pues en dicha información se “inflaron” los números.