CIUDAD DE MÉXICO.- Con retratos de víctimas de violencia y vestidos de blanco, cientos de personas marchan en Morelos pidiendo paz y seguridad; esto ocurre el mismo día en el que un policía fue atacado en Temixco y siete camionetas robadas en Cuernavaca.
La onceava “Caminata por la Paz” fue convocada por la Diócesis de Cuernavaca, marcha encabezada este día por el Obispo Ramón Castro Castro. Los asistentes de todas las edades, avanzan por calles del centro de la capital morelense pidiendo justicia y el cese de la inseguridad que azota a la entidad.
Desde las 7:25 de la mañana, fieles católicos y ciudadanos comenzaron a llegar a las inmediaciones de la iglesia de Tlaltenango, al norte de Cuernavaca, punto de partida de la marcha que dio inicio a las 9:00 horas.
“¡Justicia!”, “¡Queremos paz!”, son los gritos oídos en la movilización.
El objetivo principal de esta caminata, según los organizadores, es promover un mensaje de paz, armonía y compromiso social, en medio de una creciente demanda por seguridad.
Los asistentes llevaron fotografías de sus seres queridos, quienes han sido víctimas de la violencia en la entidad gobernada por la morenista Margarita González Saravia.
Algunos retratos tienen escrita la palabra “Justicia”, mientras que otros manifestantes exhiben las fichas de búsqueda de personas desaparecidas, acusando que salieron a la escuela o al trabajo y no regresaron a sus hogares, sin que hasta el momento se tenga pista de ellos.
El llamado principal de los participantes es a las autoridades estatales y federales para que garanticen la seguridad de los habitantes de Cuernavaca y de los otros 35 municipios de Morelos.
Durante la caminata, el contingente entona himnos cristianos y oró por la paz en el estado.
Previo a la marcha, el Obispo Ramón Castro Castro afirmó en una rueda de prensa que sus demandas son justas.
“La paz no es una utopía, sino una posibilidad real que nace del amor, de la solidaridad y del compromiso de todos”, sostuvo.
Por motivo de la movilización, las autoridades municipales informaron sobre cierres parciales en sentido norte a sur en diversas vialidades. Las afectaciones se registraron en la Avenida Emiliano Zapata (a la altura de la iglesia de Tlaltenango), Álvaro Obregón, Ricardo Linares, Mariano Matamoros, Galeana e Hidalgo.
‘No es justo vivir en el temor ni en la desconfianza’
Al concluir la marcha, el obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro Castro dirigió un mensaje en el que reprochó los niveles de violencia registrados en el estado y en el País, al señalar que pese a los esfuerzos, las autoridades no han logrado otorgar la seguridad que el pueblo requiere.
“No podemos estar tranquilos porque hay muchas cosas que no están en su sitio apropiado, que no están en su lugar y por eso no tenemos paz, y esa es la razón por la que estamos aquí para manifestarnos públicamente a favor de la paz y con ello queremos gritar ese profundo anhelo: necesitamos la paz y no queremos quedarnos de brazos cruzados. Si bien es cierto que hay una nueva estrategia en el gobierno federal y el estatal para combatir la violencia, todavía nuestras autoridades no han logrado crear las condiciones adecuadas y suficientes para superar esta violencia”, consideró.
“Una violencia que nos afecta a todos de una manera o de otra y que abarca las distintas esferas espacio-temporales. No es justo vivir en el temor, en la desconfianza, nadie merece que lo priven de su vida, de su familia, de sus bienes”, apuntó.
El líder católico refirió que hay datos duros de diversos delitos que aquejan a la sociedad y no han podido tener freno. En el estado, resaltó el caso de Cuautla, Huitzilac, Tres Marías, Xochitepec, Puente de Ixtla, Amacuzac y Axochiapan. En recorridos, dijo, hasta las señoras que venden tamales le comentan que deben pagar derecho de piso para continuar con su negocio.
Manifestó su pesar por la inseguridad, la corrupción, la impunidad, la trata de personas, el derecho de piso, el narcotráfico las extorsiones, “la cultura de la muerte”, el huachicol fiscal, los desaparecidos y las fosas de exterminio.
“Por doquier brotan nuevos y lamentables episodios de asesinatos, algunas son masacres, hay también indicio de la existencia de docena de campos de exterminio que representan delitos de lesa humanidad, eso es grave y doloroso y no podemos permanecer indiferentes”, indicó.
“Cuánta gente tiene miedo de no regresar a casa, ese es el pan de cada día de millones que salen a estudiar a trabajar, a buscar trabajo, a comprar, a divertirse y vemos con mucha pena y dolor lo evidente que no se puede ocultar con artilugios numéricos o con técnicas narrativas contrarias a la verdad, la post verdad nos está comiendo la conciencia a todos y esto no puede ser, es catastrófico”, opinó.
Roban siete camionetas en Cuernavaca y balean a policía en Temixco
Este sábado, la zona conurbada de Morelos fue escenario de dos hechos violentos: un comando armado perpetró el robo de siete camionetas en Cuernavaca, mientras que horas más tarde, un elemento policial fue herido a balazos durante un operativo en Temixco.
En el primer incidente, un grupo de hombres armados irrumpió en un predio ubicado en la Colonia Volcanes de Cuernavaca, utilizado por una agencia automotriz para resguardar vehículos. Los delincuentes sometieron y amarraron a los vigilantes para luego llevarse siete camionetas, dándose a la fuga con rumbo a la autopista México-Acapulco.
Las cámaras del C5 captaron su paso por el fraccionamiento Brisas de Temixco; sin embargo, hasta el momento no se ha reportado la detención de los responsables.
Horas después, alrededor de las 06:50 de la mañana, la violencia se trasladó al fraccionamiento Burgos, en Temixco. Policías acudieron al lugar, cerca de un hotel, para atender un reporte de robo de motocicleta.
Al llegar, fueron recibidos con disparos. Un agente resultó herido y fue trasladado de inmediato a un hospital, donde permanece bajo observación médica.
En relación con este segundo hecho, las autoridades lograron la detención de cinco personas, quienes están siendo investigadas por su presunta participación tanto en la agresión al oficial como en el robo de la motocicleta.