ONU se encuentra en proceso de retirada de Mali

Naciones Unidas se encuentra en medio de lo que el secretario general António Guterres describió como retirada sin precedentes de Mali por orden de la junta militar de la nación africana

Naciones Unidas se encuentra en medio de lo que el secretario general António Guterres describió como retirada "sin precedentes" de Mali por orden de la junta militar de la nación africana, la cual ha traído mercenarios del Grupo Wagner de Rusia para ayudar a combatir una insurgencia islámica.

El enviado especial de la ONU para Mali, El-Ghassim Wane, expuso el lunes al Consejo de Seguridad de la ONU la magnitud de la operación: Los 12.947 efectivos militares y policiales de la ONU deben ser enviados a casa, sus 12 campamentos y una base temporal deben ser entregados al gobierno, y 1.786 miembros del personal civil deben ser cesados antes de la fecha límite del 31 de diciembre.

MISIÓN

El embajador de la ONU en Mali, Issa Konfourou, dijo que la junta militar está cooperando con la misión de mantenimiento de la paz de la ONU, conocida como MINUSMA, pero que no ampliará el plazo.

Naciones Unidas también tiene que trasladar unos 5.500 contenedores marítimos de equipos y 4.000 vehículos que pertenecen a la ONU y a los países que aportaron personal a la MINUSMA, señaló Wane.

  • Ese proceso ya ha comenzado, pero continuará durante un periodo de "liquidación" que inicia el 1 de enero de 2024 y que tiene una duración de 18 meses, en el que la ONU mantendrá policías en los tres centros de la capital, Bamako, Gao y Tombuctú, donde se está reuniendo el material.

En agosto de 2020, el presidente de Mali fue destituido en un golpe de Estado en el que participó un coronel del ejército que llevó a cabo un segundo golpe de Estado y que asumió la presidencia en junio de 2021. Desarrolló vínculos con militares rusos y el Grupo Wagner, cuyo dirigente Yevgeny Prigozhin se presume muerto luego que su avión se desplomó la semana pasada.

La ONU desplegó a sus fuerzas de paz en 2013 y la MINUSMA se ha convertido en la misión de la ONU más peligrosa del mundo, dado que han fallecido más de 300 miembros de su personal.

En una carta de 13 páginas enviada a los miembros del Consejo de Seguridad y que se dio a conocer el lunes, Guterres dijo que "el calendario, la magnitud y la complejidad de la retirada de la misión no tienen precedentes".

Señaló que el vasto terreno del país, "el entorno operativo hostil en ciertas regiones y sus climas hacen que la retirada de la misión en un plazo de seis meses sea extremadamente difícil".